Celebrar a un personaje histórico o de la cultura popular puede terminar en un escalofriante desastre, y en Rusia vieron cómo el horror se erigía en forma de una estatua siniestra.
Sabemos que a veces no hay presupuesto para contratar a un experto en el arte de la escultura y que en el pueblo de Novovoronezh, las autoridades no tenían la obligación de mandar hacer esta estatua, pero los rusos seguramente dijeron: “miren el espanto que nos están dando” cuando vieron esta figura perturbadora en un parque de esta localidad.
La estatua fue creada y puesta en este lugar con motivo del aniversario 250 de Novovoronezh y representa a la joven Alenka, quien, según una leyenda rusa, fundó este pueblo y fue asesinada. Sin embargo, el rostro de esta figura causaba más miedo que deseos de celebrar.
Su mirada inquieta a cualquiera, no solamente a los niños, y las personas empezaron a compararla con personajes como Marilyn Manson o la monja poseída de la película El Conjuro 2.
Pero la comparación más acertada es con Sahar Tabar, mejor conocida como la Angelina Jolie Zombie. Esta chica de 19 años se sometió a diferentes cirugías estéticas para lucir como la protagonista de Maléfica, pero el resultado fue algo aterrador. Así se veía antes y después de sus operaciones.
La gente en este pueblo ruso de inmediato se quejó de que la estatua era un espanto, por lo que la administración de Novovoronezh decidió retirarla. Además, aclararon que no era un monumento y por eso solamente duró tres días ahí antes de que se la llevaran.
Se retirará. No es un monumento, es una instalación de arte. Nuestro grupo de trabajo la dedicó a los eventos que marcaron el aniversario de la aldea de Alenka. La instalación del objeto de arte es solo uno de los muchos eventos de este tipo.
– Svetlana Tulinova, jefa de la administración de Novovoronezh
Aunque la estatua era espantosa debido a su parecido con personajes de horror, decidieron subastarla y usar el dinero en programas de caridad. La subasta inició con el precio 13 500 dólares, y sí hubo quienes ofrecieron más.
Al final, la estatua fue vendida a un comprador anónimo que pagó nada menos que 35 000 dólares por esta aberración hecha en metal. Al menos tuvo una utilidad caritativa después del susto que le dio a todos. Imagina que vas de regreso a casa en la noche y ves esta estatua en un parque… hasta el más valiente gritaría de horror.