Entendemos que hay varones que aman el gimnasio, pero cuando decides ponerte en ‘modo romántico’ con el hoyo de una pesa, tal vez debas hacer una introspección urgente porque algo no anda bien contigo.
En definitiva, algo no anda bien con un tipo alemán que perpetró tal travesura a la hora de ponerse caliente, solo para darse cuenta que su miembro se había quedado atorado en la pesa, por lo que tuvo que llamar a los bomberos.
Y para hacer todo este asunto más penoso, el servicio de emergencias decidió compartir esta fotografía en Facebook, que mostraba la pesa de 2.5 kilos destrozada, después de pasar horas cortándola:
El urgido fue llevado en un principio al hospital, pero los doctores no pudieron liberarlo. Es ahí donde nuestros héroes entraron al rescate, sedaron al hombre y usaron todo tipo de sierras vibradoras e hidráulicas que quebraron la pesa.
Y como moraleja, ni La Guía del Varón, ni los bomberos, recomendamos imitar esta hazaña, a menos que quieran que su historia aparezca en nuestra página.