Vaya, cambiar el nombre tradicional de un antojito mexicano, haciendo referencia a proteger la dignidad de las mujeres, no es algo que sorprenda o que resulte descabellado hoy en día. Sin embargo, no siempre que escuchemos sobre la aparición de este tipo de medidas deberíamos creerlo.
Hace unos días circulaba un rumor en redes sociales sobre la propuesta de la diputada local de Querétaro, María Alemán Muñoz Castillo, quien supuestamente proponía “cambiar el nombre de las gorditas porque fomenta la discriminación hacia las mujeres”. Aunque el dato resultó falso, la polémica a su alrededor fue real y fuerte.
Supuesta declaración
En el portal de bromas prácticas y noticias espurias El acueducto Querétaro (AQ) se presentó originalmente el “exhorto de María Alemán”, que resultaba ser no más que una chanza que se viralizó por redes sociales. El mensaje, según los bufones, iba así:
No podemos seguir vulnerando la condición de las mujeres, basta de abusos. Es momento de que se cambie el nombre de “gorditas” por “masa con relleno”, exhorto a los diputados a que esta propuesta se convierta en una ley en beneficio de las queretanas.
Revuelo en redes
A pesar de la completa falta de veracidad en la información publicada por AQ, la nota sí tocó fibras sensibles en la sociedad y, prácticamente, nadie cuestionó la información debido a que no es ni la primera ni la más extravagante declaración política que parece broma.
Obviamente, y tomando como cierta la nota, muchas personas, mujeres y hombres, tacharon de ridícula “la iniciativa” y empezaron a burlarse del sin sentido: “Esta generación con su lenguaje incluyente, se ofende por todo…”, “Vivo con el miedo de un movimiento que quiera cambiar el nombre de las gorditas”, fueron algunos de los comentarios en Twitter sobre el tema, con el ocasional “No puedo creer que se lo creyeran, es una falsa noticia”.
El acueducto Querétaro
Este portal se autodefine como un “diario satírico cuyo único fin es el entretenimiento”. Además, se justifica diciendo que todo su contenido es ficticio y no corresponde a la realidad, desentendiéndose de cualquier uso que se le dé a sus productos. Incluso se jacta de ser un sitio web “desinformativo”.
Por supuesto, la aclaración no es de lectura obligatoria (hay que sortear banners y links para encontrarla) y constituye un “muro de texto” que no todo el mundo se animaría a leer y probablemente por eso alguien confundió la nota con algo real o, de plano, usó el artículo para crear controversia a sabiendas de su falsedad.
María Alemán
La diputada por el PRI es licenciada en Derecho y maestra en Gobierno y Políticas Públicas. Sin embargo, no es la primera vez que el portal AQ trolea a la política priísta, pues anteriormente se habían mofado de ella con un reportaje/chiste titulado “Diputada María Alemán afirma que el agua moja”.
Debido a que su formación académica y su puesto como diputada local en Querétaro da para involucrarse en asuntos de políticas públicas, sí era posible considerar de su competencia legislar en asuntos que ayudaran a combatir la discriminación, lo que le otorgó “credibilidad” a la falsa noticia que la usó como motor.
Reflexión
A pesar de que la noticia era totalmente falsa, deja en manifiesto algunas realidades de nuestro actual uso de las redes sociales, donde hubo algunas manifestaciones que iban de lo chusco a lo realmente agresivo, incluso contra la diputada implicada, que ni sabía de qué iba el asunto, por lo que quizá deberíamos reflexionar al respecto.
Primero, es importante verificar la veracidad de las fuentes de información, pues las redes pueden operar como un “teléfono descompuesto”. Segundo, es necesario ser críticos y tolerantes para no dejar que nuestras emociones lleven la controversia a la violencia y tercero, no hay que meterse con las gorditas de la gente, todos las amamos.