La oportunidad de ver el amanecer, respirar aire fresco o salir a trabajar con todo el ánimo son algunas cosas que nos esperan al despertar, pero también puede ser que la somnolencia no te permita tener tus sentidos al cien por ciento y te ocurran algunas desgracias, aunque también estás bajo riesgo por lo que otros hagan, incluida la naturaleza.