En las solicitudes de trabajo debería existir una casilla especial en la que la gente explique si padece algún problema de atención, porque contratar a alguien despistado puede salir muy caro.
Estas 40 personas debían hacer una sola cosa para desquitar su salario, pero seguramente se distrajeron con una ardilla que pasaba por ahí y terminaron arruinando horas o incluso días de trabajo con su equivocación. Así es, tenían un solo trabajo y ni eso pudieron hacer bien.