Personalmente, yo esperé Navidad con ansia para comer todo tipo de manjares una y otra, y otra vez. Sí, todos pecamos de glotonería en estas fechas (y eso que todavía falta Año Nuevo), pero esta perrita llevó su glotonería al siguiente nivelm, a tal grado que arruinó la navidad de sus humanos, pues se comió todo el pavo navideño… TODO.
De acuerdo a su dueño David Barret, Bubba, una Chi Apso (cruza entre Chihuahua y Lhasa Apso), de 5 años, se escabulló directo a la cocina, en vísperas de Navidad y se robó la comida.
La familia no notó a la hambrienta amiguita hasta que de repente colapsó, hinchada en el piso, sin poder moverse.
Del pavo sólo quedó una pequeña parte de la pechuga pero, el resto de la cena, la cual debía alcanzar para tres personas, se encontraba en el estómago de Bubba.
David compartió en Twitter una graciosa imagen de la perrita, donde se muestra en su peso y forma normales, y una segunda donde se ve que a penas puede con su ser. La foto se hizo viral rápidamente, con 24,000 likes y casi 10,000 retuits. David explicó:
“Era un pavo que mi madre había preparado, pero lo dejó cerca del borde de la mesa. Después vimos a la perrita tirada, sin poder moverse, pues era un gran pavo. Al final, mi tía trajo dos pavos y nos compartió de su cena”.
Los seguidores de David encontraron la historia hilarante, incluso decían: “¡Es del mismo tamaño que el pavo!”
La Navidad no se arruinó del todo, los dueños de Bubba invitaron a sus familiares para que compartieran de su cena navideña y así todos contentos, excepto Bubba que probablemente se arrepintió después de haber comido tanto.
Tal vez su propósito para este año nuevo sea bajar de peso.