Quién no recuerda la portada del disco Nevermind, de Nirvana, o Thriller, de Michael Jackson, o la mítica The Dark Side of the Moon, de Pink Floyd…
Estas portadas se han vuelto icónicas en el mundo de la música y las recordamos por ello. Sin embargo, existen otras que quizá han pasado a la fama no por ser las mejores y tener un arte sorprendente sino todo lo contrario: son tan cutres que terminan siendo una maravilla.
Así que te invitamos a ver las portadas más feas de la música. Son tan malas que las terminarás amando.