Los concursos de habilidades caninas quedaron atrás. Mientras que los concursos de belleza perruna premian al mejor pelaje, un corte impecable y una postura que hace pensar que algunos perros tal vez no son perros, sino humanos con disfraces, en California, los lomitos poco agraciados se reúnen para competir por el título de El perro más feo del mundo. Y sí, algunos pueden tener una imagen de espanto, pero cada uno es una adorable criaturita peluda llena de amor.
Este año (2022), un perro destacó sobre el resto. No tenía pelo en su cuerpo, solo un mechón gris que creía en su cabeza, sus patas eran largas a comparación de su cuerpo y se doblaban hacia afuera. Además, su cabeza estaba torcida y su gesto, aunque adorable, no es de los más bellos. Su nombre es Mr. Happy Face y fue coronado como El perro más feo del mundo 2022 y no hay nadie que no esté de acuerdo.
Mr. Happy Face es una rara cruza de un crestado chino y un chihuahua. Actualmente tiene 17 años y en 2021 fue adoptado de un refugio animal por su dueña Janeda Banelly. Según cuenta Banelly a Sonoma-Marin Fairgrounds Event Center, los organizadores del evento, los veterinarios, dijeron que el perrito podría vivir alrededor de un mes debido a su avanzada edad y los problemas médicos que tiene.
El refugio en Arizona donde fue rescatado le mostró a Banelly un perro con problemas de salud y realmente feo. Sin embargo, el ánimo de Mr. Happy Face fue lo que enamoró a su ahora dueña. Los problemas de salud y la edad eran el motivo por el que había permanecido sin ser adoptado. Pero la mujer juró ese día que “él sería tan amado que nunca recordaría la horrible vida que había tenido anteriormente”.
Este feo perro no es fan de subir escaleras, usar pañales, compartir la cama y, sobre todo, “no ser el centro del universo y los besos de su mami”. Es un perro viejito y chipil, pero realmente amado. A pesar de tener que estar el resto de su vida bajo medicación, ha logrado lucir uno de sus más grandes talentos: ser feo.
Otros de los hobbies de este gremlin hecho perro es dormir, roncar y ladrar en sus suelos. Banelly ya conoce sus sonidos y sabe que él hace unos realmente extraños cuando está feliz. Según ella, parece una camioneta Dodge Ram que trabaja a diésel. Además, tiene una lengua más larga que la de Jim Simons y siempre está afuera de su hocico.
Mr. Happy Face compitió con otros perros bravamente feos en un concurso que no está hecho para burlarse de su fealdad, sino para celebrar sus peculiares rasgos, ya que, debajo de sus arrugas, abultado pelo, calvicies y caras retorcidas, son unos canes amorosos. Según Banelly, este evento sirve para recordarle a los humanos que los perros también necesitan amor y una familia.
Después de tener una avasalladora victoria, Mr. Happy Face recibió 1500 dólares, que su dueña piensa usar para mantener la salud de su anciano perro y ayudarlo a sobrellevar sus problemas físicos derivados de varios tumores en su cuerpo. Con su victoria, el can nos da una importante lección: no importa que seas feo, siempre habrá alguien que te ame por quién eres.