Estar frente a un grupo y dar clase es una labor para profesionales, no solo por la responsabilidad de educar a las nuevas generaciones, sino porque tienes que lidiar con la personalidad de cada persona en el grupo, incluidos aquellos estudiantes que son “la piedrita en el zapato”. Una maestra de Madrid, España, aplicó un “castigo” a un par de sus alumnos, quienes no entendieron que el propósito principal de la escuela es aprender.
Dos chicos de su clase no dejaban de platicar, pero ella no les puso un sello de periquito en su libreta, sino que los pasó al frente a que compartieran su espectáculo con el resto del grupo. Tranquilos, no es la maestra que recibió un striptease de sus alumnos.
La docente, según un video compartido en TikTok, pasó a un par de sus estudiantes a hacer una coreografía viral, de esas que son populares en la plataforma de videos. Los alumnos pasaron al frente apenados y riéndose por el peculiar castigo que su maestra les estaba haciendo: en lugar de “Queremos que baile la pelusa”, la profesora los puso a bailar la canción Mercho de los argentinos Lil Cake, Nica Valdi y Migrantes.
Sin embargo, la vergüenza pronto se convirtió en un gusto y ambos alumnos sacaron los mejores pasos para el resto de sus compañeros. Al final, todos se divirtieron un poco y hasta les dieron aplausos a los bailarines platicones. Además, hubo quienes aprovecharon para grabar un video con el performance, para luego subirlo a redes.
Ahora así son los castigos en la escuela. En mis tiempos nos daban de reglazos en las manos. pic.twitter.com/IPfgcTZvIe
— tacodealacran (@tacodealacran) February 13, 2023
En la cuenta de Guillermo Tendero (@gxillee), uno de los platicones que subió a bailar, se publicó el clip con la descripción: “No me puedo creer que haya hecho esto”. El video no tardó en volverse viral y obtener más de 6.6 millones de reproducciones, al cierre de edición. Eso sí, entre los cientos de comentarios que el metraje recibió, algunos no sabían si era un premio, mientras que otros afirmaban que esas coreografías eran el peor castigo.
‘¿No será premio en vez de castigo?’; ‘A mí también me hizo bailar por llegar tarde’; ‘Ay, mi profe de inglés nos hacía cantar’; ‘Quiero una profe de esas’; ‘Ahora sé cómo castigar a mis alumnos’; ‘A la profesora también le encanta’; ‘Cómo que ‘Castigo’, si eso es premiazo para aprovechar y sacar los pasos prohibidos’.
—Comentarios en el video