El ejército chino está preocupado por el creciente número de aspirantes a reclutas que no cumplen su estricto examen de aptitud. Las máximas autoridades afirman tener la respuesta ante demasiado fracaso y esto se debe a: la masturbación y los juegos de computadora.
Si bien pudiera haber una eventual guerra mundial en la que China tuviera que amenazar directamente a algún país, es posible nadie tenga por qué tener miedo, porque resulta que el ejército chino está ocupado haciendo otras cosas que al parecer son más importantes para ellos.
Según el People’s Liberation Daily, en una ciudad del país oriental, el 56% de los solicitantes militares fueron rechazados debido al hecho de que tenían una dieta y estilo de vida carentes. El periódico reveló que uno de cada cinco era considerado demasiado gordo, y la tecnología era culpada por eso.
Según un comunicado al respecto del tema por parte del Ministerio de Defensa: “El proceso de reclutamiento de China tiene reglas y procedimientos estrictos. La calidad de nuestros reclutas está garantizada y las cabeceras de nuestras fuerzas armadas fluirán largas y fuertes”.
Desde su llegada al poder en 2012, el presidente Xi Jinping ha anunciado la necesidad de construir un ejército más fuerte y listo para el combate, al tiempo que lidera los esfuerzos para centralizar el control del Partido Comunista sobre el mismo.
El presupuesto militar de China había visto aumentos de dos dígitos durante varios años hasta el año pasado, cuando se elevó un 7,6 por ciento.
Los jefes del ejército afirmaron que el nivel de salud está relacionado con estar demasiado tiempo sentado con los videojuegos, masturbación excesiva y muy poca actividad física.
La tecnología portátil también tuvo una rebanada de pastel en la culpa, sólo por el simple hecho de que el 46% de los solicitantes no aprobaran sus exámenes debido a pasar todo su tiempo mirando sus teléfonos y otras pantallas.
El informe también dijo que la mayoría de los jóvenes eran insalubres porque bebían demasiadas bebidas gaseosas y comían demasiados alimentos poco saludables, dañando el hígado y los riñones.
¡Vaya!, por fin los chinos tienen un lado débil, y resulta ser que es su propio ejército.