Muchas personas odian el término “influencers” que se les da a cierto porcentaje de la población que cree influenciar a sus seguidores por medio de redes sociales. En realidad hay gente que sí se dedica a ello y hace dinero pues las marcas los contactan para ser publicitados en sus páginas. Esa es la clave para convertirte en “influencer”, deja que ellos lleguen a ti.
Sin embargo, existe un porcentaje de jóvenes que se autodenominan así, y en lugar de esperar a que las marcas lleguen a ellos, demandan en vez de negociar, es decir, piden cosas gratis a cambio de publicidad, y muchos empresarios ya se hartaron de esta actitud y los están quemando.
Ya sea por medio de un post humorístico en Facebook, o un letrero en su establecimiento, estos negocios lo han dejado muy claro: los “influencers” deben de dejar de pedir cosas gratis y optar por buscar nuevas estrategias que beneficien a las dos partes. Estos son solo algunos ejemplos de gente que los ha puesto en su lugar:
1. Suena a un trato justo
2. ¿Influencer…?
“Háznoslo saber y te cobraremos el doble”.