La gira de Bad Bunny está volviendo locas a las personas. Desde la chica que compró por error los boletos caros del concierto hasta la abuelita que le dio todos sus ahorros a su nieta para que pudiera asistir al evento, hay de todo en este mundo de risas y memes, pero para ustedes traemos a las muchachas que hicieron fila para comprar boletos, pero no traían dinero.
Esta no es una historia que se resume en “se me olvidó la cartera”, sino algo aún más especial. Shanik y Melissa acudieron a la Arena Monterrey en el estado de Nuevo León, México, a hacer fila para comprar los boletos del concierto del puertorriqueño, pero ellas decidieron creer en las personas de Monterrey y los sanpetrinos para que en acto de bondad les brindaran los recursos para adquirir el preciado boleto, pues no contaban con el capital.
En Monterrey ni el frío ni el largo tiempo de espera pudo tumbar el ánimo de los regios cuando llegó el momento de hacer fila, pues, según Milenio, ya había casas de campaña, cobijas y hasta una tradicional carnita asada mientras esperaban que la taquilla estuviera disponible para adquirir el pase del masivo.
Tenemos una buena causa, no tenemos dinero para el boleto, pero estamos haciendo fila con la esperanza de que otra gente se apiade de nosotras y nos pueda depositar para alcanzar nuestro boleto.
—Shanik
La esperanza muere al último y a las jovencitas no les importó no tener dinero, pues ellas tienen fe en las personas de su ciudad, confianza en la caridad y calidad humana que les pueden brindar y, sobre todo, tienen un objetivo preciso: no solo obtener un boleto, sino que sean en la zona más cercana al escenario.
La historia de Shanik y Melissa fue conocida en un videoblog de Alejandro Villanueva Madness, quien realizó un pequeño recorrido por la fila y entrevistó a las personas que estaban formadas. No solo había presencia de la extasiada juventud entregada al perreo, también los abuelos hacían fila, ya sea para ellos o para sus nietos.
Tenemos fe en la gente de Monterrey, confiamos en las personas, que son buenas personas, que todavía quedan buenas personas en el mundo.
—Shanik y Melissa
Las jovencitas aprovecharon la cámara para compartir su misión y pedir el apoyo de quienes vieron el contenido. Además, dieron su número de cuenta para que todo aquel que quiera hacer una donación pueda realizarlo. Todo apoyo es bueno, incluso aceptaron los 10 pesitos que les ofreció su entrevistador.
Solo esperamos que después de días de espera y dormir en la vía pública, a nadie le pase lo mismo que el tipo que se formó en la madrugada para ser vacunado, pero se quedó dormido y nadie lo despertó.
