A pesar de los cambios en la forma en que se produce y distribuye la música, la realidad es que los discos de vinilo nunca se fueron del todo, y ahora hay un enorme auge de amantes de lo antiguo que los siguen comprando, e incluso artistas actuales que graban en este formato.
Algo que también los caracterizaba eran sus portadas, que para algunos estaban “incompletas”, así que se han dado a la tarea de usar sus cuerpos para poner la parte que les falta, y el resultado es muy divertido: