Los videos musicales tienen como objetivo impresionar y llamar la atención: ponerle un trasfondo a la música para realzar el mensaje, ya sea de rebeldía, romántico o de cualquier otro tipo. No cabe duda de que si quieres lucir bien en tu producción audiovisual, aparecer montado en una moto de lujo te da un aspecto épico. A menos que el vehículo sea robado, así solo das razones para dudar de tu integridad.
Hace unos días, el cumbiero urbano conocido como Chama lanzó su nueva producción Lokiando, en la que además de presumir sus dotes artísticas, se exhibe montado en una motocicleta robada recientemente en Argentina. Cuando lo descubren, le empiezan a reclamar y a exigirle que la devuelva, aduciendo que él fue el ladrón. Por su parte, Chama responde que no la robó y que lo discriminan por ser peruano.
Lokiando en moto
En el video de su canal de YouTube, el músico aparece cantando junto a una multitud que se reunió para participar en el video, bailando y gesticulando. La motocicleta de alta gama BMW, con valor de unos 70 554 dólares, es captada en varios cuadros de la producción musical. Sin embargo, nunca se distinguen claramente las placas o marcas oficiales que la identifiquen legalmente.
Es obvio que Chama está consciente de la presencia de la motocicleta, pues incluso se monta en ella para interpretar su canción Lokiando. Además, muchas de las personas en el video aparecen embozadas o muy abrigadas, dificultando su identificación, pero quien resulta fácilmente reconocible es el músico de origen peruano.
Acusación popular
Cuando la motocicleta es “reconocida” como el vehículo robado temprano por la mañana el 28 de mayo de este año en La Plata, Buenos Aires, Argentina, los usuarios de las redes sociales empezaron a acusar al cantante de ser uno de los perpetradores del delito. El vehículo robado es exótico (actualmente existen solo unos ocho en Argentina) y tiene colores opacos característicos que sirven para identificarlo con mayor facilidad, haciendo prácticamente incontrovertible el hecho de que la motocicleta robada y la que apareció en el video musical son la misma.
Aunque no existía una acusación oficial o una investigación sobre la persona del músico al momento de los señalamientos y censura por parte de las redes sociales, el cantante buscó la asesoría de un abogado y se presentó voluntariamente en la fiscalía para declarar y ofrecer toda su cooperación antes de que hubiera ninguna pesquisa oficial en su contra.
Se declara inocente
En declaraciones públicas, Chama ha asegurado que él nunca ha cometido robo y que a pesar de haberse encontrado en la Plata en la fecha en que ocurrió el despojo de la moto, él no tuvo nada que ver ni conoce a ninguno de los implicados en el delito. Así lo dijo ante la fiscalía por consejo de su abogado:
La gente cree que soy un chorro (un malandrín), que solo vine a su país a robar. Se cuelgan de ese odio y hacen acusaciones, porque no me conocen. Yo no soy un chorro, soy un artista y no tengo antecedentes penales. A veces sí me siento estigmatizado, por eso es que hemos salido, mi abogado y yo, a limpiar mi nombre. En Argentina hay mucha gente buena, pero también hay quien piensa que solo vine a hacer mal, solo porque soy extranjero.
-Chamo para el programa ‘América Noticias’
El móvil
¿Por qué aparece la moto en el video? Las teorías abundan, desde los primeros en darse cuenta de la presencia del vehículo robado, que aducen que simplemente el cantante robó la moto para presumirla en el video, hasta los que tienen teorías conspiratorias de que los ladrones podrían haber buscado perjudicarlo, “plantando la moto en el video, para implicarlo” en el delito.
Sea como sea, no se ha encontrado la moto en posesión del Chama y no se ha identificado al chico como uno de los ladrones que sustrajeron la BMW del estacionamiento donde estaba guardada. La razón por la que los ladrones exhibieron el valor hurtado, ya sea por infantil diablura, caradurez o mero descuido, queda abierta a la especulación.
Chama
Con diez años de residencia en Argentina y cinco de carrera en el canto urbano, Chama comparte su producción por YouTube mientras obtiene los fondos para sus videos de otros trabajos. Según su propio testimonio en el programa de opinión argentino Nosotros a la mañana, llevaba trabajando dos meses como feriante antes de hacer el video y el financiamiento del mismo corrió a cuenta de su salario de un año como albañil. Al momento de la filmación, personas que quisieron participar en él (a quienes no pudo identificar porque venían con el rostro tapado, por el frío) le ofrecieron la moto e incluso le dijeron que podía conducirla, lo que el cantante se negó a hacer.
A raíz del lanzamiento de Lokiando, desde la aparición de la BMW, que se presume es la que fue robada en mayo en La Plata, en sus redes sociales se ha visto bombardeado por mensajes de odio, peyorativos y despectivos, así como reclamaciones y conminaciones a que “devuelva la moto”, llamándolo “ladrón”, “delincuente” y “peruano”, lo que es evidencia del trato xenófobo que recibe el cantante. Lo único que consta es que efectivamente es peruano, hecho que él mismo admite orgullosamente, pero lo de ladrón o cualquier otro apelativo altisonante tendrá que ser corroborado o desmentido por las vías legales investigativas.