Los ninjas, también conocidos como shinobi, han sido temidos durante muchos siglos, mientras que en Hollywood los describen como unos guerreros sanguinarios, la verdad es que sus habilidades se concentran en el espionaje y el sigilo.
En la actualidad, los ninjas están prácticamente en extinción. Solo queda uno vivo en Japón, su nombre es Jinichi Kawakami, el jefe número 21 del clan Ban, una dinastía de más de 500 años de antigüedad, de acuerdo con lo registrado en la historia de ese país oriental.
En una entrevista para el Daily Mail, Kawakami dijo:
Creo que soy conocido como el último ninja, porque es probable que ninguna otra persona haya aprendido todas las habilidades que han sido transmitidas de maestros ninjas a lo largo de cinco siglos. Sin embargo, los ninjas ya no existen formalmente.
Este hombre de 63 años es ingeniero comercial y desde la corta edad de seis años ha iniciado con el entrenamiento para convertirse en ninja; está adiestrado para poder oír una aguja caerse en el cuarto de al lado, esconderse en los lugares más inusuales, ser silencioso o resistir altas y bajas temperaturas, sin agua ni alimento por varios días.
En su arduo entrenamiento, tuvo que escalar paredes, saltar grandes alturas y aprendió el uso y manejo de sustancias químicas para la fabricación de venenos y de antídotos de veneno. Esta forma de vida no fue nada fácil:
El entrenamiento fue duro y doloroso. No fue divertido, pero no pensaba mucho en el porqué lo estaba haciendo. Entrenar se volvió parte de mi vida.
A pesar de poder cortar la garganta de sus enemigos, con tan solo una estrella metálica y acabar con tu vida de más de 20 maneras posibles, Kawakami dice que la mayor cualidad de los ninjas no es ser los asesinos más sanguinarios, sino ser los más sigilosos espías y poder escapar de la muerte siempre que sea necesario:
Si lanzas una rama, las personas van a ver a ese lugar, dándote la oportunidad de huir. Tenemos un dicho: ‘es posible escapar de la muerte postrándose en las pestañas de tu enemigos’ significa que estás tan cerca que no te puede ver.
Para escapar de la muerte, los ninjas son conocidos por su astucia e inteligencia, pueden desaparecer entre el humo y nadie sabrá hacia dónde se han ido.
Son los maestros de la cautela y del sigilo, podría haber uno detrás de ti, persiguiéndote todos los días y tú ni te enterarías de su presencia, hasta que llegue el momento de atacar. Dominan el arte de la sorpresa a la perfección, es su mejor escudo y su mayor arma.
Kawakami ahora administra un museo dedicado a los ninjas Iga-ryu, en Iga, a unos 350 kilómetros de Tokio, también ha empezado un trabajo de investigación sobre la historia de estos guerreros legendarios en Japón.
Está al tanto de que, el estilo de vida de los ninjas no pertenece a la era moderna y por ende, ha decidido que el arte de los shinobi morirá con él ya que no tiene intenciones de transmitir sus conocimientos a nadie más, pues no está de acuerdo con difundir técnicas de asesinato y espionaje profesional.
Si no cambia de parecer, Jinichi Kawakami será el último ninja de Japón.