Sabemos que el tema del control de armas en Estados Unidos ha sido sumamente debatido; unos cuantos piensan que portar un arma es necesidad, mientras otros más están en contra. No sé que opinen ustedes, pero tal vez la ley de control de armas sea buena para la sociedad estadounidense, sobretodo por gente como la que protagoniza la historia de hoy.
Resulta que un hombre de Florida disparó accidentalmente su arma cuando se disponía a sentarse. Lo peor es que disparó así mismo… En el pene.
Ahora, no solo su “mejor amigo” está lastimado, también enfrenta cargos criminales por posesión de arma de fuego.
Su novia dijo a la policía que el hombre de 38 años, llamado Cedrick Jelks, se sentó inconscientemente en una arma cargada que estaba en el asiento del conductor de su auto. El arma se disparó con el peso, y la bala dio directo en la entrepierna, ocasionando un sangrado instantáneo.
La chica llevó a su novio rápidamente al hospital más cercano, donde tuvieron que intervenirlo. Hasta este momento su condición es desconocida, pero amigos cercanos dijeron a medios locales que los doctores intentarían rescatar su miembro.
Al parecer no fue un día de suerte para Jelks, pues la policía llegó a investigar la causa de la herida, solo para descubrir que el hombre ya había tenido cargos por posesión de cocaína, por lo que es ilegal para él portar un arma.
De acuerdo a los archivos del Departamento Correccional de Jacksonville, Jelks había sido arrestado en varias ocasiones, la mayoría de ellas por conducir ebrio, así que están conscientes de que el hombre no es un ciudadano ejemplar, por lo que su caso se agrava más.