Ya que estamos más adentrados en el tema de la ofensiva, y después de haber aprendido a utilizar el Golpe de cruz y jab en el post anterior; ahora continuaremos con los golpes más peligrosos y dañinos del boxeo.
Como se mencionó en el artículo anterior, siempre el golpe de gracia es aquel que no se ve venir, y tanto el gancho como el uppercut, son dos golpes que si se lanzan con eficacia, pueden sorprender a cualquier oponente y lograr derribarlo.
Empezaremos describiendo un par de reglas para estos dos golpes:
- No tirar un uppercut en vano. Es decir, no lanzar un uppercut a menos que sea precedido por otro golpe.
- No mostrar un gancho a menos que se esté utilizando para preparar otro golpe.
- Lanzar un gancho es mejor cuando el oponente no lo ve venir, principalmente seguido de una cruz o un uppercut.
- Tira los dos golpes con toda la intención de hacer daño.
Vamos a ver el video que preparó Chad Howse, mostrando los ejercicios correspondientes a estos dos golpes, y posteriormente continuaremos con algunos consejos que nos ha compartido:
1. Pon tu cuerpo en acción
Cada golpe comienza desde el suelo, especialmente con el gancho y el uppercut. Las caderas son el aspecto más importante de cada golpe. El brazo no se extiende como cuando estás lanzando una cruz o un jab.
Deja que las caderas guíen el golpe, seguido del hombro y posteriormente el brazo.
2. Protegerse al mismo tiempo de lanzar el golpe
Cuando se lanza un gancho, la mayor parte del tiempo descubren la barbilla también, dando al oponente un gran objetivo para golpear. Manten la mano opuesta hacia arriba y la barbilla hacia abajo durante toda la duración del golpe.
Siempre hay que tener en cuenta que el golpe que no se espera es el más dañino, y cuando se lanza un golpe lo que menos se espera es recibir uno a cambio. No hay que descuidar nunca este punto
3. Ráfaga de golpes
Una buena combinación para construir un uppercut: lanzar un jab, cruz, gancho y luego terminar con un uppercut sólido.
Para dar un gancho poderoso: tirarlo después de lanzar una cruz. Incluso puedes lanzar uno después de un jab que por lo general es inesperado.
Lo ideal sería lanzar un puñetazo al final de una ráfaga o combinación de golpes, o al menos después de lanzar otro puñetazo.
4. Atrapar a tu oponente
Para aterrizar un duro golpe en el lugar correcto sin que el oponente se lo espere es necesario que el contrincante no cubra esa parte.
Si estás lanzando un uppercut, tienes que precederlo con un gancho para conseguir que su guardia quede de lado, abriendo el centro de su cuerpo y haciéndolo vulnerable a un uppercut.
Para sacar a tu oponente del camino, lanzar un jab, cruz o uppercut será una buena idea, ya que distraerá su mente, descuidará algunos puntos de protección y tendrás oportunidad para atacar.
5. Concentrarse en la velocidad y precisión, no en la energía
Esto es muy visto y utilizado en casi todos los deportes, por ejemplo el baloncesto: un jugador no realiza un tiro con toda la fuerza que tiene, sino que se mueve rápido y precisa la dirección de su tiro.
El poder y energía es algo que no se debe forzar. Si lo haces, corres el riesgo de fatigarte prematuramente y perder.
Como siempre, tus comentarios son bienvenidos. Aporta tus experiencias para apoyar este artículo y que otros puedan aprender más a cerca de este genial deporte.