Lo complicado para un profesor es poder mantener el interés de sus estudiantes y para sí mismo, pues luego de tantos años de enseñar la misma clase se puede caer en la monotonía y perderle el gusto a la enseñanza.
David Wright tiene 70 años, de los cuales ha dedicado 45 a la enseñanza de física en el Tidewater Community College, en Estados Unidos, y parece que encontró la fórmula de que sus alumnos adoren sus clases… y no solo ellos.
Desde 1974 empezó a enseñar en este lugar y lo sigue disfrutando como si fuera uno más de los jóvenes de su clase, quienes se divierten mucho, pero no nada más ellos, sino que una de sus alumnas compartió algo de lo que este hombre hace y se ha vuelto muy popular en redes.
Fue mi primer trabajo tras graduarme y jamás pensé que fuera a estar aquí toda mi vida profesional.
Si me la paso bien enseñando, mis estudiantes disfrutarán acudiendo a mis clases. Primero hablamos de la parte teórica; de lo que ocurriría. Luego hacemos la demostración práctica y más tarde discutimos sobre lo que acaba de pasar. Intento mostrarles cómo la física se aplica al mundo real. Ellos valoran poder hacer la prueba y ver las consecuencias de esos experimentos.
—David Wright
Erica, una de sus estudiantes hizo una compilación de los experimentos que hace David para su clase y de inmediato se volvió viral. Muchos quisieran tener un profesor como este.
Además de ser maestro también se ha desempeñado como consultor y guionista para el programa de televisión Science Files de la NASA, realiza sus experimentos en parques temáticos e incluso ha sido invitado a Saturday Night Live.
No se trata de un maestro de física como cualquier otro, sino que es toda una celebridad y eso no es fácil de encontrar.
Y’all need to see this video collage of all the crazy things my Physics Professor did this semester😭. He’s in his 70s and is still doing all of this for us🥺💛 pic.twitter.com/JaICjzVB5I
— Erica🌱 (@its_riccaa) December 11, 2019
No se trata solo de algo divertido, sino que nos demuestra la pasión que David siente por su profesión y el cariño hacia sus estudiantes, y justo eso es lo que lo impulsa a seguir encontrando formas divertidas de compartir sus conocimientos.
Ojalá que más maestros sigan su ejemplo y se conviertan en verdaderos modelos a seguir por los jóvenes, como el profesor Wright.