Claro que tiene sus ventajas ser un hombre alto: son considerados más atractivos y son mejores para algunos deportes; además influye en tu vida profesional, por lo que puedes llegar a ganar más dinero, y esto a su vez, favorece la autoestima.
Sin embargo, también tiene sus puntos negativos, mismos que se reflejan en la vida cotidiana, pues el mundo no está diseñado completamente para este tipo de personas, sino en una altura más o menos estándar, que sería aproximadamente de entre 1.80 y 1.60 metros. Vamos a ver los principales problemas a los que día a día se tienen que enfrentar los gigantones: