Caballeros, están en todo su derecho de exigir a su mujer ser más específica, porque miren que nada más ellas se entienden y luego por eso ocurren situaciones confusas como la siguiente.
Y es que con aquello del regreso a clases, que los útiles, que el uniforme, que esto, que lo otro, esta mujer le pidió su marido, de nombre Marco, que si le hacía el grandísimo favor de ayudarla con lo que le faltaba para el regreso a clases del pequeño Andrés, en este caso eran unas fotos de la bendición.
Ahora bien, el problema es que ella no especificó con claridad lo que quería y le pidió unas fotos infantiles del niño. ¿Ustedes qué entienden? Pues Marco entendió que debía hacerle una divertida sesión de fotos a Andrecito en plan infantil. Su conversación por WhatsApp no tiene precio, en verdad el hombre estaba confundido.
La farmacia Guadalajara no solo es eso, una farmacia, también es una tienda de conveniencia donde podemos encontrar desde comida, hasta un departamento de fotografía. La esposa de Marco se refería a que su esposo debía tomar fotografías tamaño infantil para entregar en la escuela, pero nuestro amigo se convirtió en el fotógrafo más profesional y obedeció órdenes… claro, las que él entendió…
Aquí tenemos una foto de Andrecito viendo los dulces, no hay nada más infantil que un niño viendo las Paletas Payaso…
Aquí tenemos a Andrecito recorriendo los pasillos en busca de juguetes, porque eso es lo que hacen los infantes…
Finalmente, después de unos minutos, Marco le mandó las fotos infantiles a su mujer…
Y obviamente, después de ver las imágenes, su mujer no podía parar de reír…
El hombre solo cumplía órdenes, y aunque su caso es bastante gracioso, tal vez sirva de ejemplo para ser más específicos cuando se pide algo, el mundo está lleno de Marcos que necesitan instrucciones específicas…