Tener mascotas en casa es una de las mejores experiencias de la vida, pues no solo se trata de un animal con el que compartes el espacio, ya sean gatos, perro, tortugas o aves, sino que se vuelven parte de la familia.
Aquellos que tienen padres que se resisten a esto saben que es muy difícil convencerlos, pero nada como llegar con un nuevo amigo a casa para despertar su cariño. Aunque en ocasiones terminan queriéndolos más que a ti.
Este fue el caso de Macarena González, una chica que compartió por Twitter cómo al principio, su padre, Rodolfo, se negaba a tener un perro en casa. Pero después de tenerlo, se enamoró de él, se olvidó de sus restricciones que le había dicho a su hija e incluso le comenzó a decir “bebé”.
Tema perro: NO va a estar en la casa bajo ningún punto de vista, porque mamá me dijo [que] vos le escribiste que el perro se quedaría en nuestra casa en algunos momentos, eso no, Macarena, bajo ningún punto de vista.
—Rodolfo González
Es normal que los padres no quieran recibir mascotas en casa. En ocasiones porque son conscientes del espacio que hay al interior de los hogares, pero, sobre todo, porque saben que ellos serán los que procurarán que el animal se encuentre bien, coma a sus horas y le limpien su lugar.
Pero al ver la reacción de Rodolfo González, sabemos que todo ese enojo y negación se esfumó cuando conoció a un pequeño y peludo amigo. Ragnar, un cachorro de pastor ovejero, es el nuevo integrante de la familia y ahora el abuelo orgulloso lo presume en redes sociales.
Les quiero hacer una confesión, el nuevo integrante de la familia ‘Ragnar’ es muy mimado, pero yo como abuelo apoyo esa situación, nadie es perfecto, este bebé tampoco, con la aclaración que es muy fiel y compañero sin igual. Bienvenido, Ragnar, siempre juntos.
—Rodolfo González
En Twitter, los seguidores de Macarena quedaron conmovidos por la historia. Muchos de ellos relataron historias similares en su casa, donde los padres no querían animales en la casa y terminaron adaptándose y consintiéndolos como si fueran sus hijos. “Mi papá fue igual”; “El final de esta historia, todos lo adivinamos”; “Te amo, papá que aceptó al perrito”; “Pero ¿quién podría resistirse a ese peludito?”, fueron algunos de los comentarios.