Un ingenioso padre se acaba de ganar la cuarentena después de hacerle un juego arcade retro de tamaño real desde cero a su hijo; lo mejor es que es totalmente casero y solo consiguió unas cuantas tablas de madera.
Mientras muchos de nosotros nos quejamos de no tener mucho que hacer durante este encierro, Steve Addison, de 32 años, usó el tiempo libre para construirle a su hijo Félix, de 3 añitos, una genial máquina de videojuegos. Lo mejor es que se divierten horas los dos.
Steve dijo en una entrevista que se sintió inspirado después de que su suegra le regalara un Atari en Navidad: “Solo lo jugué un par de veces ya que me tomó un tiempo conectarlo a la TV. Esto es lo que me dio la idea de tener un gabinete propio. Somos una familia amante de los videojuegos, incluso tuvimos un tema sutil en mi boda”.
Después de elaborar algunos planos basados en el tamaño del televisor que iba a usar, Steve hizo un modelo a escala de cartón antes de plasmarlo en madera.
Steve acepta que no es un hombre de manualidades y que cuenta con muy pocas herramientas en su casa, por lo que tuvo que pedirle otras tantas prestadas a su padre. Steve cortó las piezas de madera con una sierra y lijó los bordes. Enseguida unió cada pieza con soportes en el interior para mantener la estética en el exterior.
“A medida que se desarrolló la construcción, busqué en línea algunos botones arcade y encontré algunos en eBay. Luego instalé una computadora Raspberry Pi con juegos arcade añadidos”, dijo el creativo padre.
En general, el cuerpo de la máquina tardó dos días en construirse y Steve también ha pasado su tiempo libre pintando meticulosamente a los personajes que adornan la máquina, dejando que Félix los eligiera a su gusto.
Entre más pasa el tiempo a Steve se le ocurre agregar más y más cosas a la consola, como las luces led alrededor del exterior. “En general, el proyecto probablemente me costó 190 dólares, incluida la madera, la electrónica; la pistola de luz fue probablemente la cosa más cara”.
Como era de esperar, Félix, que cumple cuatro años el próximo mes, “lo ama absolutamente” y juega casi todos los días. Sus juegos favoritos son Bubble Bobble, Spyro the Dragon, Sonic the Hedgehog, y Steve cuenta que es bueno jugando Marvel vs Capcom, donde su personaje favorito es Spider-Man.
Ahora que terminó este gran proyecto Steve dice que le sobra un poco de tiempo, por lo que empezó a trabajar en una versión de mesa más pequeña, la cual hasta el momento le ha costado cerca de 62 dólares.
Quién sabe, tal vez Steve esté descubriendo su nueva vocación y ni cuenta se ha dado, pero tal vez pueda construir maquinitas personalizadas en internet y hacerse millonario.