Sin duda que la pandemia de coronavirus ha dejado algunas cosas positivas, más allá de lo triste que resulta la enfermedad y las personas que han muerto. Una de ellas es el trueque, un intercambio de cosas que la gente tiene en casa y que sirve para entablar relaciones de amistad y también una economía colectiva basada en las verdaderas necesidades más que en el consumismo.
Desde tiempos inmemoriales las personas han intercambiado cosas por las que otras personas tienen o producen, y esto se ha mantenido durante milenios, como cuando cambiabas tus tazos con tus amigos: eso es un trueque, y justo sobre estos populares objetos en México trata lo que veremos a continuación, ya que un niño y un joven son los protagonistas de una historia que enterneció a las redes sociales.
Resulta que un joven ofreció en trueque un tazo de Pac-Man, esto en Sinaloa, México, y no pidió nada en especial, sino lo que algún interesado pudiera intercambiar, y no pasó mucho tiempo cuando le llegó una oferta. El padre de un niño se puso en contacto y le dijo que su heredero quería ese tazo y le ofrecía dos manzanas o una bolsa de dulces.
Estos juguetes vienen dentro de las bolsas de botanas Sabritas, y en este año las lanzaron de nuevo con una edición especial de Pac-Man, pero se terminaron en agosto de este año, así que el niño quería tener uno de los que le faltaba en su colección y no dudó en ofrecer sus dos manzanas. El joven aceptó y pactaron el intercambio, ya que no estaban lejos el uno del otro, y claro, siempre bajo la supervisión del padre.
Después de ver la publicación el padre del niño se puso en contacto para afinar los detalles del trueque y sobre todo el punto de reunión, porque pensando en que tal vez estaba muy lejos no valdría la pena, pues sería más costoso el moverse hasta el lugar que lo que vale el tazo, pero afortunadamente todo se acomodó para que se pudiera hacer el intercambio.
De esta forma se llegó a un acuerdo y ambas partes cumplieron lo prometido, como debe de ser cuando se hace un trueque, porque hay personas que se comprometen y luego no aparecen o no entregan lo que habían ofrecido, pero en este caso estamos ante dos jóvenes caballeros a quienes se les veía la cara de felicidad por obtener su tazo de Pac-Man y por la otra parte, un par de ricas manzanas.
Ahora estos dos son buenos amigos y tal vez seguirán haciendo trueques en el futuro, y por lo pronto se ganaron el cariño de miles de personas en redes sociales, ya que sorprendió que cambiaran algo tan simple, pero es que de eso se trata el trueque, de dar y recibir lo que se necesita, no simplemente de consumir.