Muhammadu Bello Abubahkar Masaba Bida, también conocido como Muhammadu Bello Masaba, murió a los 93 años de edad, dejando atrás a 130 viudas desconsoladas, a 203 hijos y un montón de nietos. El super semental era un predicador nigeriano que además aseguraba tener poderes mágicos y curar enfermedades. En 2008 tenía 86 mujeres, pero para la fecha de su muerte esta cifra subió a 130; de las cuales, algunas siguen esperando más hijos.
El predicador musulmán murió apenas el 28 de enero, según el diario nigeriano Daily Trust. El anciano garañón falleció por una enfermedad y fue enterrado el pasado domingo. En una entrevista con la BBC de Londres, en 2008, explicó que él no buscaba a las mujeres sino que ellas acudían a él. Aseguraba tener poderes curativos dados por Dios.
Una joven de 20 años explica que su madre la llevó a revisión médica con el predicador y curandero, y que luego le propuso matrimonio:
“Dije que no podía casarme con un hombre mayor, pero él (Masaba) argumentó que era una orden directa de Dios”.
El difunto padre de dos centenares de nigerianos también pasó tiempo en la cárcel acusado de poligamia. Según el Islam, un hombre puede tener cuatro esposas máximo, mientras las trate igualmente. Pero su exceso de mujeres le valió ser arrestado en 2008. En ese entonces, dijo:
“Si Dios me lo permite, me casaré con más de 86 esposas. Un humano normal no podría casarse 86 veces, pero yo sí por la gracia de Dios. Me casé con 86 mujeres y en mi casa hay paz. Si hay paz, ¿qué pude haber hecho mal?”.
Bello había trabajado como maestro, vivía con su familia en un complejo de apartamentos completo. Aseguraba que nunca persiguió a sus esposas, y afirmaba que ellas lo buscaban por su reputación de sanador. Muchas de sus esposas era más jóvenes que él. Incluso algunas más jóvenes que unos de sus hijos.
En entrevista con Al Jazeera English, sus esposas dijeron que era un buen padre y esposo.
Luego de ser sentenciado a muerte por negarse a divorciarse de 82 de sus esposas, fue perdonado y enviado a su casa cuando prometió divorciarse de ellas ese mismo año. Pero huyó de su casa. El caso fue conocido en todo el mundo, y molestó a muchos musulmanes. Entonces firmó un comunicado en el que pedía a otros hombres se abstuvieran de hacer lo que él:
“Un hombre con 10 esposas colapsaría y moriría, pero mi poder me es dado por Alá. Por eso es que puedo tener a 86 en control”, dijo.
Un jurado posteriormente lo indultó y pidió que le fueran retirados los cargos por atentar a sus derechos a la vida, la libertad y la privacidad, los cuales son protegidos por la constitución de Nigeria.
Contrario a los reportes de los medios, se rehusó a divorciarse de 82 de sus 86 esposas. No solo eso, sino que agregó otros 18 hijos a los 120 que ya tenía. En 2012 en una entrevista, dio a conocer que ya tenía 97 esposas y todavía quería más.
“¿Muchas esposas? Si solamente tengo 97, además todavía me voy a casar más veces. Seguiré teniendo esposas hasta que muera. Quien combata mi vida amorosa, no tendrá éxito. Lo que yo hago es divino. Es una asignación y me seguiré casando hasta el fin de mis días. Solo quiero decirle a quienes me combaten, que dejen de hacerlo porque ese tipo de gente solo combate contra Dios, su creador”, dijo.