No cabe duda de que los papás, en la gran mayoría de los casos, son seres de amor que buscan lo mejor para sus hijos. A pesar de que lleguen cansados del trabajo, siempre buscarán una reserva de energía para pasar un rato agradable al lado de sus pequeños.
Un papá se llevó el corazón de muchos, ya que se presentó a un partido de básquetbol cubierto de suciedad. Aunque el aspecto del hombre no era agradable, lo enternecedor fue que acababa de salir de trabajar en una mina y corrió directo a la arena para ver el partido al lado de su pequeño hijo.
El conmovedor momento ocurrió en Pikeville, Kentucky, Estados Unidos, donde los Wildcats de la Universidad de Kentucky se enfrentaron internamente en su tradicional Juego de Azul-Blanco en la Appalachian Wireless Arena. Una fotografía del padre cubierto de hollín disfrutando los encestes con su hijo se viralizó y llegó a ojos del propio entrenador del equipo, John Calipari.
El entrenador quedó conmovido con la imagen que recibió por mensaje que no dudó en compartirla y contar su historia familiar, pues en un tuit dijo que cuando su familia comenzó el “sueño americano”, se sostuvo debido al trabajo en una mina de carbón en Clarksburg, Virginia del Este. Calipari no sabía el nombre del varón, solo que había corrido después de su turno para estar con su hijo.
This is my Husband Micheal McGuire with our son Easton! Sorry I had to create a new twitter account. Lost access to my old account since I rarely use twitter. We can be reached by Instagram, Facebook or this Twitter account!
— Mollie Gail McGuire (@mcguire_mollie9) October 24, 2022
Pronto, las redes se movilizaron y la esposa del hombre, Mollie Gail McGuire, se presentó en Twitter para tener contacto con Calipari. Fue ahí cuando se conoció que el héroe de la historia fue Micheal Joe McGuire, quien compartió una momento único con su hijo Easton, de tres años, su esposa y su bebé Lynlee.
Micheal tenía una gran tradición con su padre para el equipo azul, por lo que cuando salieron los boletos a la venta, Mollie no dudó en comprarlos para que Easton también pudiera tener esa experiencia. El hombre terminó de trabajar hasta tarde el día del partido, por lo que tuvo que correr directo de la mina para encontrarse con su familia.
Easton quedó impresionado con el juego y celebraba con un baile cada anotación. Mollie creyó que alguien grabaría al pequeño bailando y se volvería viral, pero recibió más atención de la que pensaba, pues la foto del padre y su hijo se circuló masivamente por internet, saturando los teléfonos y las redes sociales de la familia.
Micheal continuó su trabajo en la mina sin darse cuenta del revuelo que había causado. Por su parte, Mollie tuvo la oportunidad de hablar con el entrenador de los Wildcats, quien invitó a la familia a los juegos que tuviera en el equipo y ser tratados como VIP.
El comentario de Mollie para mí es: ‘Mi esposo es humilde. Es muy trabajador. Este es un trabajo duro, pero él gana lo suficiente estando allí para que yo no tenga que trabajar y es un gran padre. Ha hecho esto muchas veces’. Ella dijo: ‘¿Sabes que su barba es roja?’. Le dije: ‘¿Qué quieres decir?’. ‘Eso era polvo de carbón, en su barba’.
—John Calipari para KSR
Cuando Micheal McGuire salió de la mina, recobró la cobertura, no podía creer la cantidad de notificaciones y mensajes. Al hablar con su esposa, se dio cuenta de lo que estaba sucediendo. El hombre, quien trabaja en la mina desde hace aproximadamente un año, ahora tiene un gran recuerdo con su hijo envuelto en la pasión por el deporte y el amor por la familia.