Seguramente, cuando escuchas hablar de tampones piensas solamente en un artículo de higiene femenina, pero dejemos de lado lo que ya conocemos de ellos por un momento y veamos otras posibilidades que estos productos pueden proporcionarnos a todos, ya que, en un caso extremo, incluso pudieran salvarte la vida.
1. A favor de la ecología
Quizá los tampones sean un tema poco agradable para muchos, pero un grupo de ingenieros británicos ha estado utilizando este implemento de higiene femenino como una solución literalmente brillante para detectar la presencia de contaminantes en vías fluviales. El equipo de investigación de la Universidad de Sheffield, encabezado por el ingeniero ambiental David Lerner, le ha dado a los tampones un uso totalmente diferente a su propósito convencional, absorbiendo agua de las vías fluviales y estudiándola para identificar fuentes de contaminación.
Este método es particularmente relevante en los ríos de ciertas partes de Inglaterra que reciben grandes cantidades de aguas residuales, en lugar de que éstas lleguen a plantas de tratamiento. Uno de los contaminantes en estas aguas residuales son un grupo de químicos denominados abrillantadores ópticos. Esto es, los químicos utilizados para hacer que los colores blancos sean más brillantes. Estas sustancias se encuentran en la pasta de dientes, en los detergentes y champús, y brillan bajo la luz ultravioleta, haciéndolas más fáciles de rastrear e identificar.
El equipo de investigación propuso esta forma alternativa de identificación en contraste con métodos convencionales que son costosos y complejos. “La presencia de aguas residuales en los ríos es algo muy desagradable, bastante extendido y difícil de rastrear,” dijo Lester al diario británico El Guardián, y agregó: “Nuestro nuevo método puede ser poco convencional, pero es barato y funciona”.
2. Como vendaje médico
Los tampones son estériles y vienen muy bien empaquetados en sus propias bolsas impermeables. Están diseñados para ser ultraabsorbentes, haciéndolos perfectos como un vendaje de primeros auxilios. Se pueden abrir y luego pegarlos o atarlos sobre una herida como un vendaje improvisado. Y, como ya hemos mencionado, pueden ser utilizados para tapar un agujero de bala hasta que llegue una atención médica más sofisticada. El primer uso de este tipo se registró en la Primera Guerra Mundial. Muchos artículos en la sociedad moderna se desarrollaron por primera vez como una faceta de la investigación militar y los tampones pueden muy bien ser uno de estos productos.
3. Filtro de agua
Otro excelente uso de los tampones para la supervivencia es como un filtro de agua. Si bien no filtrará las amenazas químicas o biológicas de metales pesados, sin duda sí se puede utilizar para filtrar los sedimentos y partículas flotantes. Esto sería considerado un filtro de primera fase, que puede aumentar drásticamente la vida y la eficacia de su filtro de agua principal.
También se puede utilizar un filtro de este tipo antes de hervir el agua, y así filtrar las partículas más grandes. En este ejemplo, se ha empujado un tampón en el cuello de una botella de agua vacía. Se hace un pequeño agujero en la tapa y después se vierte agua sucia para filtrar a través del tampón. ¡El agua sale cristalina!
4. Para encender una fogata
Casi todo el mundo sabe que el algodón es un excelente apoyo para encender fuego. Cuando las fibras de algodón seco de un tampón se separan y son alimentadas por una chispa o llama, van a estallar en una bonita chimenea equilibrada.
Si has hecho ya el trabajo de preparación del fuego, puedes dividir fácilmente 1 tampón en 3 o 4 partes para iniciar el fuego. Si añades algo de lápiz labial o vaselina tendrás un mejor combustible.
5. Filtro de agua directo
En un caso de emergencia, te sentirás orgullosos de decir: “Sí, tengo un tampón en la boca”. Y es que estos artículos funcionan como un filtro de agua directo, como un popote improvisado con la carcasa de plástico y el algodón del tampón. Simplemente hay que arrancar un poco de algodón y otras cosas de la carcasa de plástico.
Y ahora, ¡a beber!
6. Mecha para una vela
Se puede utilizar el cordón de un tampón como mecha en una vela improvisada, que se hace a partir de la resina de pino. Puedes utilizar un pequeño recipiente como una roca, una concha, etc. Embarra un poco de la resina sobre el recipiente y deja que el cordón del tampón absorba la mayor cantidad, después de unos minutos enciéndela. Puede llegar a durar más de 20 minutos.
7. Cuerda
La cuerda atada a un tampón es un cordón trenzado de algodón, compuesto por varias piezas de 10 a 15 centímetros de largo cada uno. A pesar de que no es mucho, es utilizable, por ejemplo, para hacer una trampa que te ayude a capturar tu cena.
8. Pluma para flecha
La cerbatana sin duda tiene su lugar en la historia de la supervivencia. Desde los nativos americanos hasta las tribus de Nueva Guinea, la cerbatana y los dardos primitivos han puesto comida en la mesa desde hace miles de años.
Son herramientas de caza silenciosas y mortales, sobre todo para la caza menor. A menudo, sobre todo en Estados Unidos, el algodón natural fue utilizado como pluma del dardo. Por lo tanto, el algodón de un tampón es un candidato perfecto para que los dardos tengan más precisión al ser soplados.
10. Soplador para fogata
Ahora el tampón te servirá para soplar en lugar de chupar. En un escenario de supervivencia, un envase simple puede hacer la diferencia entre la vida y la muerte. Un contenedor hermético al agua se puede utilizar para llevar el agua, hervir el agua, y cocinar comidas.
Los contenedores naturales no son fáciles de hacer o encontrar, pero son muy prácticos y útiles, así que se puede hacer mediante el uso de carbones calientes para quemar una cavidad en un pedazo de tronco, mientras soplas, en este caso con el aplicador de plástico del tampón, que se puede utilizar para intensificar las brasas para quemar la cavidad.
10. Contenedor para cerillos
En condiciones húmedas, el mantener los elementos para iniciar el fuego tales como cerillos, mechas y el mismo algodón, puede ser un desafío. El empaque de los tampones es a prueba de agua, y es un excelente “saco seco” improvisado, para todos los elementos que son sensibles a la humedad. Si lo atas con el mismo cordón del tampón ya tienes un gran contenedor impermeable.
11. Anzuelo para pescar
La pesca con anzuelo es un método muy eficaz, especialmente cuando se utiliza cebo vivo como larvas y gusanos. Un gancho hecho con una espina, alguna línea trenzada natural, y un flotador hecho con elementos de un tampón hacen la combinación perfecta para un aparejo de pesca de supervivencia.
Por su tamaño, bajo costo y la multiplicidad de servicios que te pueden brindar, seguramente, al menos cuando decidas salir al bosque en busca de aventuras, ¡la próxima vez pensarás seriamente en cargar con unos cuantos tampones en tu mochila!