Bud Buddies es una organización británica, sin fines de lucro, cuyo propósito principal es ayudar a las personas que sufren de cáncer proporcionándoles remedios hechos a base de cannabis.
La marihuana se ha usado médicamente en incontables ocasiones alrededor del mundo, a pesar de que las leyes de muchos países la prohíben y no la validan como medicina tradicional. El Reino Unido no es uno de ellos, pues su ideología aún no apoya la legalización del cannabis para fines medicinales. Este es justo el estigma que Jeff Ditchfield, creador de Bud Buddies, quiere cambiar.
En una entrevista reciente, hecha por la página UNILAD, Jeff dijo lo siguiente:
“Es obvio que el cannabis tiene propiedades medicinales, así como beneficios para la salud, se ha probado en distintas partes del mundo de manera exitosa, pero aquí en el Reino Unido aún se prohibe.
“Estamos yendo en reversa. En Colorado, incluso, puedes conseguir un cigarrillo para fines recreativos. Aquí es distinto porque somos demasiado conservadores.
“Tenemos un Primer Ministro que es hija de un vicario y cuando estaba en el Ministerio de Interiores dejó muy en claro su postura respecto al cannabis. Hay que encontrar la manera de proteger a los ciudadanos moribundos.
“No se dejen guiar por mis palabras, yo sigo lo que la ciencia dicta. Si las personas que están leyendo esto siguieran la ciencia, lógicamente llegarían a la misma conclusión que la mía”.
Jeff es parte de un pequeño grupo de personas que sacrifican sus vidas para poder satisfacer la demanda de productos cannabinoide de calidad, que ayudan en el tratamiento de enfermedades serias, como el cáncer.
Y el interés por este tema ha crecido después de que la historia de Deryn Blackwell, de 17 años, se hiciera viral. Recordemos que la madre de Deryn, Callie, dio el testimonio de vida de su hijo, quien se encontraba en su lecho de muerte cuando recurrieron al cannabis, que lo ayudó a recuperarse de manera impresionante.
El público quedó maravillado con tal historia, pues ahora el joven Deryn se encuentra impresionantemente recuperado, a pesar de que se le había diagnosticado leucemia, y sarcoma Langerhans.
La mariguana es legar para fines médicos en Australia, Canadá, y gran parte de los Estados Unidos, pero en otras partes del mundo aún sigue siendo un delito que te puede conseguir muchísimos años de cárcel, ya sea por posesión o producción.
El gobierno de la mayoría de estos lugares alega que el cannabis es una droga dañina, que causa muchos problemas mentales sumados a la adicción, y que no existen beneficios medicinales en su forma herbal.
Jeff, en cambio, ha dedicado gran parte de su tiempo investigando las propiedades anticancerígenas del cannabinoide, y ha visto como pacientes, cansados y enfermos de los tratamientos tradicionales, se han recuperado de manera impresionante.
Un estudio realizado en el 2013 arrojó un resultado bastante revelador, ya que aproximadamente 1,500 doctores, de 72 paises diferentes, revelaron que el 76 porciento de ellos aprueban el uso medicinal de la mariguana.
Además de que existe mucha evidencia basada en testimonios y anécdotas de personas que afirman que el efecto del cannabinoide los ha curado de enfermedades serias; padres cuyos hijos se encuentran enfermos, incluso de padres y abuelos en etapas terminales, Jeff ha presenciado muchos casos que lo hacen creer firmemente en su misión.
“El mayor problema que existe es la prohibición. La prohibición hace que las drogas sean más peligrosas que las propias substancias, y eso es ridículo.
“La prohibición crea un ambiente donde la única salida es comprar tu propio cannabis a alguien en las calles, quién en seguida ofrecerá drogas como la cocaína, y nosotros queremos evitar eso.
“Así que la prohibición es la que mueve a las personas a intentar con drogas más fuertes”.
Él cree que la prohibición del cannabis está matando a pacientes con cáncer, pues no les permiten acceder a la ayuda que necesitan. Buscando ayudar a solucionar este problemam Jeff se arriesga a que le den una sentencia de 14 años de prisión y su salud mental, pues es a la única persona a la que padres desesperados pueden recurrir en necesidad.
La ciencia detrás de cómo el cannabis lucha contra el cáncer se explica a través de la apoptosis (muerte celular programada). El THC se une a los receptores cannabinoides y transloca las mitocondrias malas y las células cancerosas para producir ARN que desintegra las células malignas.
Pero, ¿qué motiva a Jeff a arriesgar su vida:
“Las leyes son ridículas en este momento. Las unicas leyes que estoy quebrantando en este momento son las del cannabis, y la razón por la que las rompo es porque llegan a mi personas desesperadas y moribundas. No hay elección, es mi deber como ser humano.
“Lo que me hace seguir aquí son ellos, los padres que ayudan a sus pequeños. He visto casos de adolescentes que se han curado por completo, gracias al cannabinoide. Gracias a sus padres que nos han contactado y quienes han probado tratamientos exhaustivos y dañinos. Bud Buddies es su última opción.
“No puedo rechazar sus pedidos, cuando sé que sus hijos están muriendo. Si me rehúso a ayudarlos por miedo a la ley estos padres podrían ser estafados por vendedores que sólo quieren dinero”.
Como lo explicó la mamá de Deryn Blackburn, Bud Buddies sabe que el cannabis no es la cura total, pero el tratamiento fucniona en conjunto con una quimioterapia adecuada, y en este video explica un poco su propósito y pensamiento:
Jeff explica que es un tratamiento “porque incluso los niños que entran en remisión, todavía requieren una dosis regular para detener el retorno del cáncer, por lo que es importante para nosotros enseñar a estos padres cómo ser independiente”. Esto lo recalca en su página de internet:
“La filosofía de Bud Buddies es empoderar a las personas a ser autosuficientes, así que a todos los miembros se les enseña como cultivar, proveemos ayuda para la preparación del cannabis adecuado para su condición, la guía otorgada depende mucho de su enfermedad y condición”.
La mayoría de los niños usan aceite de cannabis en forma de tabletas para tratar su enfermedad, y se administra de manera sublingual.
Bud Buddies comenzó a concentrarse en enfermos terminales de cáncer hace cinco años, pero Jeff ha tenido que comenzar a priorizar a los padres de más de 80 niños con enfermedades terminales en el Reino Unido. Recibieron su primer caso pediátrico hace tres años y medio, y Jeff estima que este número superará los 100 a finales de este año.
“Con gusto aceptaré esos 14 años de sentencia, si eso significa que estos padres fueron ayudados en su afan de salvar a sus hijos. Recuerdo que una mujer llegó con su niña de 13 años desde España. Ahora está en remisión, y debió haber muerto hace un par de años, pero no, ahora está por graduarse de la universidad, y espera continuar con sus estudios.
“La demanda está fuera de nuestros límites, y ahce algunos años sólo asistíamos a adultos. Nos dimos cuenta de que por cada adulto que ayudábamos, podíamos estar ayudando a cuatro niños.
“Eso hacemos alrededor del Reino Unido, formando clubes alrededor del Reino Unido, donde las personas puedan plantar el cannabinoide propio, adecuado para su cáncer”.
Si bien Jeff no pidió esta misión y lo hace por necesidad, ha dicho que daría cualquier cosa por no tener esta responsabilidad, por eso su urgencia porque esto sea legal, y así dejará de ser un criminal.
Jeff insiste en el estado de Colorado como una meta a alcanzar, pues ahí el uso de cannabinoide como tratamiento de remisión es legal.
Recomendaciones de Jeff para aquellos interesados en el cannabis como tratamiento del cáncer:
- Haz una investigación, busca sobre las propiedades anticancerígenas del cannabinoide, y busca el trabajo del profesor Manuel Guzmán, de la Universidad de Madrid
- No creas todo lo que ves en Facebook, busca tus propias fuentes con universidades científicas, crea tu propia opinión.
- Esto no es una mentira, ni son falsas esperanzas, esto es un hecho: el cannabis tiene propiedades anticancerígenas.
Jeff cree que en un futuro llegarán a legalizar el cannabis, y avienta esta importante pregunta: “¿Quién es la víctima de mi crimen? Enfrentaré una condena de 14 años en prisión por un crimen que no tiene una víctima identificable”.
En un mundo donde miles de crímenes no son resueltos, y la seguridad es un tema lamentable, la mariguana para uso medicinal no debería ser un problema para quienes la cultivan.