Por lo regular se ve al padre como el ogro, el que regaña, grita e impone castigos. Pero la realidad es que los varones suelen ser más atrevidos, más cercanos a su lado infantil y no dudan en dejarlo salir cuando están con sus hijos, sobre todo si la mujer (que es realmente quien regaña a todos) no está en casa.
Estos son solo algunos ejemplos.