La autosuperación está al alcance de la voluntad y de esto es testigo Samuel Cardoso Brito, quien logró graduarse de la universidad a sus 52 años. El hombre decidió celebrarlo tomándose fotografías junto al pequeño puesto de frituras que le permitió continuar con sus estudios. En las imágenes se logra apreciar al hombre feliz con la compañía de sus familiares y amigos.
Samuel nació en Icaria, Paraná, en Brasil. De familia humilde, el varón no pasó de tercer grado cuando tuvo que abandonar la escuela para dedicarse a trabajar y ayudar con el sustento de su casa. Ha tenido varios empleos: vendedor de paletas heladas, limpiabotas hasta hizo labores de basurero para poder sobrevivir.
Yo no tenía ese deseo de estudiar, no era bueno en el salón de clases, entonces no pasé del tercer grado. A los 15 años ya no pensaba en estudiar, me iba a las minas a trabajar, pero siempre leía libros y cómics.
—Samuel Cardoso Brito
Su vida se había mantenido con sus trabajos, pero en búsqueda de estabilidad, Samuel concursó para un trabajo y completó todos los requisitos, excepto uno: tener el bachillerato terminado. De acuerdo con Metrópoles, Cardoso no consiguió el empleo, pero eso no le desanimó. Al contrario, a sus 40 años lo impulsó a retomar la escuela para poder tener su certificado académico.
Solo con un carrito de frituras se aventuró a tomar los libros y el cuaderno para regresar a la escuela. Samuel se inscribió en varios cursos, hasta graduarse del bachillerato. Pero quiso continuar con sus estudios, así que se matriculó en un curso de la Red de Educación a Distancia (EaD) en la carrera de Letras.
Solo tenía mi carrito de palomitas y un pequeño terreno, así que decidí apuntarme a un curso de EaD e irme al campo, ya que el costo de vida sería más bajo. Me mudé a Vila de Boa Vista do Cuçari, en el municipio de Prainha, para vender palomitas y así poder pagar mi curso.
Después de un gran esfuerzo y de viajar aproximadamente 12 horas solo para asistir a sus clases presenciales, Samuel ha obtenido su título universitario a los 52 años. El hombre celebró de la mejor manera posible, junto al carrito de frituras que ayudó a su sustento y al de su familia en su periodo académico. Las imágenes las compartió en su perfil de Facebook.
Samuel planea presentar su primer libro en 2024 y no piensa dejar su carrito de vendedor ambulante, pues dice que tomará sus ratos libres para seguir vendiendo, ya que le gusta lo que hace. Además, asegura que estará en las aulas hasta los 80 años.