Existe una línea muy delgada entre ser gracioso y ser un reverendo i*iota, y tal parece que algunos influencers ni siquiera la perciben porque hacen cualquier cosa con tal de ganar seguidores o unos cuantos likes, incluso grabar a dos adultos mayores comiendo unas paletas hechas con jabón que ellos mismos prepararon y así hacer que la gente vea sus videos.
Este tipo es Jay Tomy, un colombiano que se cree muy gracioso, pues fue a comprar jabones y chocolate para fabricar unas paletas que parecían de helado. Luego grabó cuando fingía ser parte de una empresa y entregaba “muestras gratis” de este “nuevo producto”. Sus víctimas fueron un par de ancianitos, lo que, por supuesto, a nadie le cayó bien, ya que lo consideraron una falta de respeto en lugar de algo chistoso.
Un "influencer" de Cartagena hizo paletas de jabón para repartirlas a adultos mayores y habitantes de calle.
Esto es humillante, asqueroso e indignante. pic.twitter.com/5wtx58zM8x
— Kathy Lambis Ricardo (@KathyLambis) November 24, 2020
La mala noticia para este aspirante a comediante es que no solo no resultó gracioso su video, sino que la Fiscalía General de Colombia ya inició una investigación y lo está buscando para que responda por su conducta, que fue calificada como un delito contra la seguridad y la salud pública, aunque Jay Tomy quiso excusarse diciendo que le había dado dinero a quienes aparecieron en el video porque lo necesitaban.
Con relación a hechos denunciados en redes sociales sobre influenciadores que habrían engañado a ancianos en Cartagena con paletas de jabón, #Fiscalía abrió investigación, a través de la Unidad de Reacción Inmediata, y adelanta actos urgentes para identificar a los implicados.
— Fiscalía Colombia (@FiscaliaCol) November 24, 2020
Ante esto, el bromista eliminó el video de sus redes y bloqueó su cuenta de Instagram, pues esta tiene antecedentes porque apenas el año pasado la policía colombiana lo detuvo por fingir robos, así como asesinatos para otro de sus “trabajos”, en el que se puso un uniforme de policía y fingía un homicidio en plena calle. Tal parece que no aprendió la lección y ahora deberá responder de nuevo por una de sus tonterías.