En todo el mundo existen personas que por diversas situaciones se han quedado sin nada y tienen que vivir en la calle, a la espera de conseguir algo para comer. Muchas de ellas piensan que volver a vivir bajo un techo es un sueño muy lejano, a menos que se encuentren con alguien de gran corazón que haga todo lo posible por ayudarlas y que a la vez le dé esperanza a toda la humanidad de que todavía somos capaces de sentir el dolor ajeno y hacer algo para aliviarlo.
Phillip Vu es un joven de 24 años que se la pasa viajando por Estados Unidos y vive en su automóvil para no gastar tanto, pero en uno de sus viajes conoció a Mike, de 46 años, quien se ofreció a limpiar los vidrios de su auto. Aunque al principio el joven se negó, luego de verlo un rato solo en la calle, decidió acercarse para comprarle algo de comida. Luego de conversar un rato, se hicieron amigos y ahí inició una tierna historia.
Mike le contó que su padre murió cuando él era pequeño y perdió contacto con su familia, por lo que desde muy joven tuvo que arreglárselas solo, lo que lo llevó a parar en varias ocasiones a la cárcel, aunque no se han explicado las razones, y, finalmente, a tener que vivir en la calle tratando de ganarse algunas monedas para comprar comida. En ese momento Phillip supo que debía hacer algo para darle una mejor vida a su amigo.
Se conocieron en New Haven mientras Phillip iba de paso a Nueva York, a una temperatura de 10 grados centígrados bajo cero, por lo que el joven se dio cuenta de que la prioridad era darle un techo a este hombre y puso manos a la obra. Dejó de viajar, lo que había hecho durante ocho meses, organizó una campaña para reunir fondos para Mike y luego de dos meses, reunió 17 000. dólares.
Esa fue probablemente una de las mejores experiencias de mi vida. Cuando emprendí este viaje hace ocho meses, cuando salí de casa para vivir en mi auto y hacer videos, mi sueño en varios años en el futuro era darle a una persona que se lo merece una suma de dinero y cambiar su vida. Nunca me hubiera imaginado que solo ocho meses después lo habría logrado. Podemos ayudar a las personas sin hogar en los EE. UU., porque una vida cambió con solo 17 000 dólares. Podemos hacer una diferencia en la vida de estas personas.
Pensé que éramos dos caras de una moneda diferente. Ambos veníamos de entornos con dificultades y en algún momento decidí reconectarme con mi familia y él no lo hizo. Vimos puntos en común hasta esa separación. Era como si estuviera viviendo mis sueños y me dijo que su sueño era viajar algún día. Él ha estado luchando por su vida y tratando de mantener a su novia y yo estoy viviendo en mi auto por ocio… Es un ser humano tan encantador y trabajador, y quiero humanizarlo.
-Phillip
Con el dinero reunido, Mike podrá pagar el alquiler de un lugar digno para vivir por más de un año, así que se podrá concentrarse en encontrar un buen empleo. Tanto su amigo como las personas que se conmovieron con esta historia y decidieron cooperar para ayudarlo le dan dado una oportunidad para transformar su vida totalmente. Tal vez no es tan difícil hacer algo bueno por las personas que más lo necesitan, y tú también puedes lograrlo.