Dynzell Sigers, un trabajador del metro de Atlanta, Georgia, Estados Unidos, se realizó una operación para alargar sus piernas y conseguir un mayor éxito en sus relaciones amorosas. Después de someterse al procedimiento y una larga recuperación, los cambios llegaron y ahora es 20 centímetros más alto y dice que su nueva estatura ha cambiado su vida.
El hombre de 27 años dijo que se dio cuenta de que tenía baja estatura cuando tenía 15 años y al invitar a salir a una chica, esta se lo hizo saber. Sin embargo, Sigers decidió apostar por su propio cambio y viajó al Live Life Taller Center en Estambul, Turquía, para someterse a un procedimiento quirúrgico.
La operación consiste en cortar el fémur de las piernas y extenderlo con una varilla. Además, se coloca un dispositivo que se opera desde afuera y ayuda a largar la vara sujeta con pines. Cada día se ajusta, mientras el proceso de recuperación y rehabilitación da, como el paciente, sus primeros pasos.
El proceso requirió cuatro intervenciones en el quirófano y costó alrededor de 80 mil dólares. Hubo dolor, pero valió la pena. Con las terapias de rehabilitación, en donde Sigers aprendió a caminar de nuevo, pronto pudo moverse por sí mismo y hasta hacer ejercicio.
Sigers ganó poco más de 20 centímetros de altura, pasó de medir 1.61 metros a 1.82 metros. El cambio es evidente y el chico está contento con los resultados, pues las chicas han volteado a verlo a él, sin importar que aún camina apoyado en muletas. Aún le faltan seis meses de recuperación, pero va por buen camino.
Siempre quise ser más alto y sabía que había más ventajas en ser más alto. Pero no tenía idea de que la altura cambiaría mi vida tan drásticamente.
—Dynzell Sigers