Según un estudio británico, todos aquellos hombres bien parecidos, y bendecidos por la belleza masculina, tienen menos oportunidades de crecimiento laboral en cualquiera que sea el ámbito en que se desempeñe.
Por muy buenos y capaces que sean para desarrollarse en sus trabajos, los colegas menos atractivos siempre serán su mayor rival, incluso aunque estos no sean capaces de realizar lo mismo que los más galanes.
Los investigadores de la Escuela de Administración de la Universidad De Londres, encontraron que siendo los hombres más agresivos e imponentes en sus labores, el ser bello puede impedir el progreso profesional de un hombre, pues los menos atractivos los consideran como una verdadera amenaza. Sí, igual que en el reino animal.
Como tales, son los más propensos a ser rechazados en trabajos donde se requiere de talento competitivo y trabajo en equipo y por lo regular, los más guapos terminan en trabajos como ventas y bancas de inversión; es decir, trabajos que son de crecimiento individual y sin competidores aparentemente cercanos.
Al estudio se unieron académicos de la Escuela de Negocios de Londres y la Universidad de Maryland. En el que concluyeron que contrariamente a lo que se pensaba, no va ligado a los estereotipos femeninos, ya que en ellas aplica en forma diferente, es decir, ¿tu carrera no avanza? Es porque estás gorda. Así funciona para las mujeres.
Para el Doctor y Asistente de Comportamiento Organizacional en la UCL, Sun Young Lee, las corporaciones buscan contratar candidatos competentes, pero las personas hacen su propia agenda y quieren que sigan sus intrucciones y no las del empleador, es decir:
“Al emplear a alguien, los hombres buscan que el recién llegado no demuestre lo que sabe hacer para que no ascienda en su trabajo”.
Estos hallazgos se basan en un estudio de 870 voluntarios, en que los participantes se presentaron con varios escenarios en los que tuvieron que contratar a alguien para un trabajo específico, pero tenían más de un candidato. Los currículos fueron creados retratando a candidatos con habilidades y cualidades casi idénticos, pero las fotografías que los acompañaban hacían la diferencia.
Según el estudio, los gerentes se ven más afectados por los estereotipos al momento de la decisión a quién contratar, además buscan servir a sus propios intereses para que las organizaciones no puedan llegar a candidatos más competentes que ellos.
Es decir, los gerentes también notaron una amenaza potencial al ver los currículos de estas personas. Debido a las tendencias a estereotipar las organizaciones para mejorar sus procesos de selección.
Así que si eres guapo o de buen parecer, lo más probable es que te identifiques y te hayas dado cuenta en qué tan cierto es este estudio. Para estos investigadores, los guapos tardan más tiempo en encontrar un puesto importante, tras las metidas de pie que otros menos atractivos les crean para evitar su crecimiento.