Este chico despertó un día y pensó: “voy a hacer el reto de los Three Peaks”; no solo eso, además pretende convertirse en la primera persona en caminar los casi 655 kilómetros que existen entre las montañas.
El reto de los Three Peaks se traduce en algo así como “los tres picos”, refiriéndose a las cimas de las montañas, las tres más altas en Escocia, Inglaterra y Gales, para ser exactos. Todo esto se hace en un lapso de 24 horas, pero existe la ventaja de ser llevado de base a base por medio de un lujoso transporte.
El chico en cuestión se llama Drew Collins y es un tipo bastante normal, quien toda su vida ha acampado, pero ahora se dedica al marketing de tiempo completo y está felizmente casado.
Lo que quiero decir es: no tienes que ser un magnate y ganar millones de dólares para hacer algo así. Alguien normal, como Drew, puede hacer cosas extraordinarias ajustadas a tus posibilidades.
Drew reta a las personas “a estar en un lugar sin señal telefónica, solo tú y tus pensamientos, en esta era moderna donde todo se arregla con nuestros teléfonos inteligentes”.
Y es verdad, solo hace falta echarle un vistazo a tu Instagram cada mañana para darte cuenta que todo mundo está enchufado a la adicción de las redes sociales.
Drew se define como un “aventurero”. Independientemente de su trabajo de tiempo completo en la ciudad, son sus actividades extracurriculares las que lo definen -a diferencia de la mayoría de las personas cuyos trabajos son los que los definen-. Él dijo:
“Como muchas personas, tengo más o menos 26 días de vacaciones para hacer grandes viajes, y como la mayoría cuando trabaja, solo los fines de semana. Me encantaría salir, tomar fotos, escalar montañas y con eso ganarme la vida, pero en este momento es un proceso lento pues, como todos, tengo facturas que pagar”.
Drew señala la importancia de apreciar la lentitud de sus procesos, pues dice que de esta manera puede ver a su alrededor. Practica lo que predica y decide que hará lento su reto de los Three Peaks; en vez de hacerlo en 24 horas, Drew lo hará en 24 días pues, de esta manera, apreciará mejor su alrededor… además de que odia correr.
“Quiero mostrarles a todas las personas que están en un trabajo de tiempo completo y comprometidos con ello que pueden hacer cosas extraordinarias, incluso si tienes que usar todos tus ahorros en un solo viaje. Vivir la vida en piloto automático es algo peligroso y mundano, a veces necesitas una aventura tipo récord mundial”.
Y, como muchas personas, Drew expresa lo mucho que odia fallar. “El miedo a fallar es algo que detiene a muchos de nosotros a dar un primer paso. Supongo que este miedo es algo natural y está presente en todos nosotros, pero es como reaccionamos hacia lo que en verdad importa”.
El fotógrafo, de 30 años, explica que ha fallado la primera vez que intenta algo: “la primera vez que subí una montaña en África del Norte fallé, y no me gustó el sentimiento”. Sin embargo, no se dio por vencido y, tras mucha preparación, Drew logró subir a la cima de esa montaña.
Antes de emprender esta expedición, el mayor reto de Drew había sido aquella vez que, acampando en el volcán de Eyjafallajökull (ni idea), Islandia, lo atrapó una gran tormenta.
“Nada te pone en tu lugar en esta tierra más que truenos, relámpagos y fuertes lluvias cayendo de arriba, sabiendo que hay lava derretida abajo.
“Aparte de que tuve un desagradable ataque de vértigo la primera vez que intenté subir a Toubkal, en las montañas del Atlas, fui desde el nivel del mar a 3,000 metros, o algo así, en 6 horas y me sentí como si la madre naturaleza hubiera golpeado mi cabeza. Decidí volver y probar de nuevo después de que fue bastante difícil la primera vez”.
Este video documenta su aventura, y es maravilloso…
https://youtu.be/oD3HwdjyY0w
Por supuesto un gran logro como este requiere una cantidad decente de entrenamiento, y después de una Navidad de indulgencia, Drew está trabajando duro para prepararse. Dijo que, desde Navidad, su dieta ha consistido en vino tinto, cerveza y más carne de lo que podemos imaginar. Pero eso es Navidad y es la única vez al año que todo el mundo debe disfrutar.
“Aparte me mantengo en buena forma, me ejercito tanto como mi tiempo lo permite y regularmente practico escalando. Tengo a Fitbit como una marca asociada para mi formación, y son excelentes en mantenerme motivado”.
No sé tú, pero esta historia me ha inspirado a salir a la naturaleza e ir a escalar o hacer senderismo, y Drew nos da un consejo para primerizos:
“Es difícil no mirar a sus pies todo el tiempo mientras te preguntas: ¿qué demonios estoy haciendo aquí? Pero levanta la cabeza y disfruta de las vistas, porque eso es lo que te mantendrá de pie, eso y el café”.
Su Instagram está lleno de fotografías con hermosos escenarios, y mucho positivismo.
La familia de Drew planea esperarlo en la cima de la última montaña, la Snowdon, y dice que espera que le tengan lista una cerveza para celebrar su logro.
Estará escalando la montaña Ben Nevis (1344 mts), caminará 390 kilómetros a Scafel Pike (977 mts) y, por último, caminará otros 265 kilómetros para subir la Snowdon (1084 mts)… Esperamos ver las fotos del antes y después de Drew.
Este intrépido viajero ya tiene en mente un plan de 20 años, donde escalará una montaña cada año, con la vista puesta en una muy famosa montaña en Rusia, y la posible covertura televisiva… ¿será el siguiente Bear Grylls?
Armado con nada más que su sentido aventurero, una casa de campaña y unas botas para escalar, Drew realizará el reto de los Three Peaks en 24 días. Planea comenzar este abril, y si te gustó su historia puedes apoyarlo con usando #WalkDrewWalk en redes sociales.
Tal vez esta historia te inspire a salir de la ciudad y visitar algún lugar asombroso. El costo, como viste, es bajo, pero la fortaleza física y mental que ganas son invaluables.