En lugar de abandonar por completo sus estudios para enfocarse en su carrera musical, como muchos ‘artistas’ lo hacen, Brian May volvió a los libros aun cuando ya era una estrella de rock.
Aunque es mundialmente reconocido por ser el guitarrista de la legendaria banda Queen, Brian es mucho más que un excelente músico. Es uno de los mayores compositores, pero él lo quiso todo y también alcanzó un alto grado en el mundo de la academia y la astrofísica.
Desde muy joven May tuvo dos grandes pasiones: la música y la ciencia. Mientras estudiaba en el Imperial College London en 1968, formó su primera banda: Smile, con el baterista Roger Taylor y Tim Staffel como bajista y vocalista.
Tal como vimos en la película Bohemian Rhapsody (2018), Tim dejó la banda en 1970 y fue cuando Freddie Mercury se integró a la agrupación, desde entonces conocida como Queen. El exitoso cuarteto se completó en 1971, cuando incorporaron a John Deacon como bajista.
Brian terminó sus estudios de licenciatura en Física y Astronomía, y en 1971 comenzó a trabajar en su tesis de doctorado. Sin embargo, para ese entonces la fama de la banda estaba creciendo más y más, así que los compromisos musicales impidieron que terminara su trabajo académico.
Pero May no iba a dejar de lado una de sus mayores pasiones y, a marchas forzadas, acabó su tesis de 48,000 palabras, llamada Velocidades radiales en la nube de polvo zodiacal. Ahí exponía que las nubes de polvo estelar en el sistema solar se mueven en la misma dirección que los planetas.
El 23 de agosto del 2007, 36 años después de haber empezado, Brian presentó sus resultados en un examen profesional en el Observatorio del Roque de los Muchachos, del Instituto de Astrofísica de las Islas Canarias. Su tesis fue aprobada y ese día obtuvo su título de doctor.
Por supuesto que un examen de ese nivel fue algo complicado y duró tres horas. Pero al final, superó las presiones y se convirtió en un campeón de la ciencia. Dijo en una entrevista que dio ese año:
Me siento muy a gusto usando este título porque he trabajado por él y voy a estar orgulloso de llamarme doctor a mí mismo de ahora en adelante.
El doctor Brian May se sumó así a la lista de estrellas del rock que cuentan con altos niveles académicos, como Dexter Holland de The Offspring y el vocalista de Iron Maiden, Bruce Dickinson.
Los aplausos que le dedicamos no son exclusivamente por haber creado estupendas canciones, sino por ser un ejemplo a seguir también en el mundo de la ciencia. Galileo también estaría orgulloso de él.