Salir con tus amigos, unas vacaciones en la playa, ropa y artículos que todo hombre desea son parte de una innumerable lista de gastos que cada vez merman los bolsillos, dejando al ahorro casi convertido en un cuento de hadas y a nuestro salario en la lona.
Contar con un colchoncito puede ayudarnos a dormir tranquilamente, además de hacer frente a cualquier imprevisto; sin embargo, ¿cómo hacer de esta odisea algo sencillo? Aquí te presentamos algunos consejos para ahorrar que todo hombre debe conocer y aplicar.
El método de las 52 semanas
Aunque en principio pudiera resultar sencillo, el método de las 52 semanas conforme avance exige mayor creatividad; hay que ahorrar una determinada cantidad de dinero similar al número de semanas durante el año; es decir, un dólar la primera semana, dos dólares la segunda, tres la tercera y así sucesivamente hasta la semana 52.
Al final lograríamos 1,378 dólares. Nada mal, si son libres de gastos y que podrías invertir para que te genere más dinero, en imprevistos y por qué no en unas vacaciones.
El 10% del salario
Ahorra el 10% de tu salario -primero págate a ti, antes que a los demás-, y vive con el 90% restante; de esta manera podrás ajustar tus gastos y comenzar a generar un colchoncito que con el tiempo seguirá creciendo. No quiere decir que te limites en tu manera de vivir, sino poner más atención en las cosas que verdaderamente se necesitan y hacer crecer tus ahorros.
Establecer un presupuesto y no sobrepasarlo, así controlas mejor tus gastos y te permite generar alguna determinada cantidad de ahorro. Si los números no son tu fuerte prueba con una hoja de balance en el cual puedes poner tus necesidades y gastos.
Evita compras compulsivas
Evita las compras impulsivas y el “para eso trabajo y me lo merezco”que no te dejan ahorrar. Comprar por impulso es una de las causas que más afectan nuestras billeteras, siendo el principal enemigo de ahorro y la tarjeta de crédito se convierte en su peor arma con un filo desmedido.
Con un mejor uso de los servicios básicos, se pueden generar ahorros que se reflejen en los pagos mensuales; puedes economizar en el uso del agua y luz eléctrica; apostar por la utilización de aparatos electrodomésticos más eficientes y ecológicos; incluso, en calefacciones.
Cuida tu economía, varón, y no dejes que tu cartera esté vacía jamás.