Ante una crisis algunos tratan de aplicar sus mejores ideas para sacar provecho de la situación, y con la pandemia del coronavirus en buena parte del mundo no podía ser diferente.
Matt y Noah Colvin vieron lo que estaba sucediendo con el virus, así que decidieron ir a todos los supermercados de Chattanooga, en Estados Unidos y llenar su camioneta con productos de limpieza y sanitizantes, pensando que harían el mejor negocio de sus vidas.
Como vieron que los botes de sanitizante para las manos, que regularmente cuestan un dólar, estaban aumentado su precio, gastaron entre 10,000 y 15,000 dólares en este producto, además de toallas desinfectantes, entre otros. Dejaron vacías las tiendas de la localidad.
Además visitaron ciudades e incluso estados vecinos, donde también compraron una enorme cantidad de artículos de este tipo, y por supuesto, hicieron pedidos a través de diversas páginas.
Luego de acomodar todo, comenzaron con la venta a través de Amazon y de inmediato vendieron 300 botes de sanitizante para las manos, en un precio entre los 8 y los 70 dólares, lo que los emocionó y les hizo pensar en que sus ganancias serían enormes.
Sin embargo, al darse cuenta de que estos productos estaban alcanzando precios increíbles, cosa que algunos, como este par de hermanos estaban aprovechando, en Amazon decidieron prohibir su venta y además les cancelaron su cuenta a Matt y a Noah.
También eBay siguió esta medida, así que de pronto el brillante negocio los dejó con cerca de 17,000 productos sanitizantes en la cochera de su casa, sin saber qué hacer con todo eso.
Ha sido un gran golpe. De estar en una situación donde lo que tengo para vender aquí y allá podría poner a mi familia en un lugar realmente bueno financieramente, pasé a “¿Qué diablos voy a hacer con todo esto?”
—Matt Colvin
La cosa se puso peor para este par, ya que las autoridades los están investigando por hacer todas esas compras y tratar de vender a precios exagerados, aprovechándose de la situación, por lo que incluso podrían enfrentar acciones legales en su contra.
Ante esto, probablemente empezarán a donar sus artículos antes de que la investigación avance. Lo que parecía un sueño financiero tal vez los deje en bancarrota, aunque eso sí, ellos y su familia no tendrán que preocuparse por el coronavirus.