Caballeros, sabemos que a la hora de conseguir un trabajo las empresas contratan en base a las aptitudes del postulante y no por su apariencia… Tal vez en un mundo utópico así sería, pero la realidad es que los entrevistadores y empresarios buscan añadir a sus filas gente que sea y luzca profesional, es por ello que las primeras impresiones son sumamente importantes.
Sin embargo, no hay necesidad de ir extremadamente formal a todas tus entrevistas, el secreto en estos casos sería hacer un poco de investigación previa para saber el ámbito y así elegir un outfit cordial a la situación.
El día de hoy hablaremos de las reglas que debes tomar en cuenta para elegir la ropa que usarás en una entrevista de trabajo dependiendo de su giro. Existen 5 categorías en los códigos de vestimenta y qué prendas específicas debes usar para cada una. ¿Estas listo para conquistar el mundo laboral?
Primero que nada, investiga
Como te lo mencionamos anteriormente, debes investigar un poco más sobre la empresa a la que te diriges, y no nos referimos a lo laboral, sino indagar sobre ¿cómo son los días en ese lugar? ¿Es un trabajo formal? ¿Es un trabajo de oficina? Cosas que te den una idea de como visten las personas normalmente ahí.
Una vez que descubres eso aplicarás la regla de “Un paso más alto”, que significa vestir un poco más formal de lo que acostumbran en la empresa; es decir, si ves que los trabajadores normalmente visten pantalones caqui y camisa de vestir sin corbata, entonces deberás presentarte a la entrevista con pantalones, saco y una camisa con corbata, pero no de traje, sino algo más casual dentro de la formalidad.
Pregúntale a las personas que trabajan ahí para que te den una guía y sepas más o menos por donde empezar. También podrías concretar una visita al lugar y ver con tus propios ojos cómo va el ambiente laboral. Algunas empresas cuentan con mucha información en sus páginas web, esa también sería una buena forma de empezar a investigar.
Niveles de formalidad para una entrevista de trabajo
Como les decía, la formalidad es la que dicta que outfit será el correcto para usar. Existen 5 categorías o “pasos” de formalidad:
– Formal de negocios
– Negocios
– Informal
– Casual
– Ropa de trabajo
A continuación veremos cada una con más detalle.
1. Vestimenta formal de negocios
Para este tipo de entrevistas necesitas verte como un hombre de negocios que toma las decisiones más importantes, formales y conservadoras del lugar. Si estás siendo entrevistado para un trabajo que requiere traje de negocios diario, la única forma de vestirte el primer día es con uno puesto.
Trabajos como una firma de abogados importante, altas posiciones en instituciones bancarias y financieras, roles ejecutivos, posiciones políticas de alto nivel o cualquier trabajo relacionado con personas poderosas. Es más, si tu empleador y jefes usan traje, tú también. Aquí no hay margen para el error, si intentas impresionar a las personas que proponen el puesto debes lucir impecable.
Empieza con un traje de colores sobrios, como azul marino oscuro o gris oscuro sin patrones. Procura que el saco sea cruzado y ajuste a la medida. La camisa deberá ser blanca, lisa, de cuello extendido o puntiagudo (no abotonado); puntas del cuello afiladas, frente liso y sin arrugas. En cuanto al calzado, elige unos zapatos tipo Oxford negros o cafés (lisos), y cuida que tus calcetines coincidan con el color del traje.
En cuanto a accesorios, la corbata deberá ser de colores y patrones conservadores, nada brillante o llamativo, y cuyo largo no toque el cinturón, el cual deberá ser negro, liso y con una pequeña hebilla de metal. Agrega un pañuelo de bolsillo blanco, un reloj de pulsera de metal que coincida con la hebilla del cinturón.
Finalmente, procura que todo tu conjunto esté perfectamente planchado, con bordes afilados, limpio y que ajuste lo mejor posible.
2. Vestimenta de negocios
La vestimenta de negocios “estricta” es para impresionar a los empleadores y no da pie a un poco de expresión de nuestra parte. Por el contrario, la vestimenta de negocios da espacio para tomar un poco de libertades y poner estilo personal hecho con buen gusto. Este tipo de código se usa en entrevistas en trabajos en los que puede que no uses traje todos los días, pero es posible que te convoquen para reuniones o presentaciones importantes.
Este tipo de código de vestir es perfecto para trabajos como algunas firmas de abogados y bancos, puestos gerenciales o administrativos, empleos de consultoría de negocios, relaciones públicas, publicidad, puestos de servicios públicos, puestos académicos. El punto es lucir como si desde un principio encajaras en el lugar, incluso si después optas por otros looks.
El traje podrá ser oscuro y de texturas suaves, sin patrones llamativos y ajustado a la medida. La camisa puede ser blanca lisa o con estampados ligeros y de cuello extendido (no abotonado). En este caso los zapatos pueden jugar más con el contraste, es decir, si el traje es azul marino oscuro, unos zapatos cafés lisos se verán bien; eso sí, los calcetines deben coincidir con el color del pantalón.
En cuanto a accesorios, opta por corbatas lisas, pero si decides llevar con patrón solo cuida que no sea muy llamativo. Evita materiales y colores brillantes. El cinturón que sea del color de los zapatos con un pequeña hebilla de metal, pañuelo en el bolsillo, reloj de pulsera de metal o cuero negro.
Si comparas los dos estilos de vestimenta notarás pequeñas libertades que de la forma estricta no podrás hacer, solo procura no exagerar en tus toques.
3. Vestimenta informal de negocios
Pongan atención, varones, porque este tipo de vestimenta es el que más nos sacará de apuros. A menos que estés en un campo de formalidad particularmente alto como derecho o finanzas, la mayoría de los trabajos no requerirán nada más que una camisa y tal vez una corbata, lo que significa que tampoco necesitarás llevar un traje a tu entrevista.
Esta vestimenta va para trabajos de cubículo u oficina en pequeñas y medianas empresas de nivel inicial o medio, trabajos administrativos y de servicio civil, posiciones minoristas exclusivas, ingeniería, laboratorios, puestos de computación o de sector tecnológico en general, servicios de comida. Cualquier tipo de trabajo cuya entrevista no demanda una presentación exagerada.
El casual de negocios puede cubrir una gama más amplia de opciones que las categorías de vestimenta de negocios; sin embargo, para la entrevista siempre opta por accesorios conservadores, lo que significa usar un saco y corbata, no perderás puntos por presentarte con estas prendas. Si llevas saco procura que sea deportivo y oscuro, sin estampados o con diseños ligeros, preferiblemente de lana. Pantalones lisos con texturas mínimas, de colores azul marino, grises o caquis.
En cuanto a la camisa, puede usar colores pero procura que no sean muy llamativos; muchos hombres apuestan por los pastel, que dan un toque de individualidad y originalidad, pero no dejan de ser sobrios para un traje. Los zapatos pueden contrastar al traje, negros o marrón oscuro servirán. Los calcetines deben coincidir con el color del pantalón, pero puedes jugar con el contraste siempre y cuando no sea de mal gusto. La corbata puede ser de cualquier color o patrón mientras no sea demasiado ostentoso, solo asegúrate que vaya con la camisa, chaqueta y pantalón.
En cuanto a accesorios, el cinturón de cuero que no falla y del mismo color que los zapatos. Reloj de pulsera con correa de metal o cuero, pañuelo de bolsillo de color o estampado. El ambiente de negocios informal permite cambiar cosas como el saco por un chaleco o suéter, pero para las entrevistas procura adherirte a la fórmula básica del blazer conservador y pantalones de vestir color liso.
4. Vestimenta casual
“Casual” no quiere decir que vistas como normalmente sales a la calle. Aunque en este código el saco y corbata no formen parte de la ecuación, el atuendo aún debe verse profesional y bien organizado. Este tipo de look se lleva generalmente cuando es para un trabajo donde no hay código de vestimenta y el proceso de entrevista es relajado.
Se lleva en trabajos como tiendas o supermercados, restaurantes y servicio de comida, trabajo manual, servicio al cliente. No debes vestirte de manera informal para una entrevista a menos que estés muy seguro de que el trabajo es de jeans y camiseta.
Para propósitos diarios “casual” es una categoría enorme; para entrevistas es más limitado. Desea algo que elimine elementos comerciales formales como el saco, pero que aún se ve respetable. La camisa puede ser de vestir o polo, limpia y lisa. Puede ser de color, pero los patrones deben estar razonablemente restringidos y procura fajarla. Pantalones lisos, no de mezclilla; los caquis funcionan perfecto, eso sí, que estén limpios y bien ajustados.
Los zapatos pueden variar, desde cuero hasta brogues o bluchers siempre y cuando estén limpios y pulidos. También puedes optar por botas o mocasines. Los calcetines deben coincidir con los pantalones.
En cuanto a accesorios, la corbata es opcional, pero vale la pena considerarla, así como el saco; estos elementos podrían ser una ventaja en tu presentación. Un cinturón de cuero que combine con los zapatos, un reloj de cuero y la mejor actitud.
5. Vestimenta de trabajo
Los trabajos de habilidades prácticas y físicas no implican que la vestimenta no sea tomada en cuenta. Aunque tu atuendo no sea la principal preocupación del entrevistador, el verse un tanto profesional no te resta puntos nunca.
Trabajos de construcción, fontanería, carpintería, jardinería, trabajo de campo o en fábricas. Muchas de estas empresas cuentan con un código de vestir específico dependiendo del área, muchos incluso proporcionan un uniforme, pero si el uso del uniforme no es riguroso o es ocasional, siempre es bueno saber cómo vestir en estos casos. Las prioridades son un poco diferentes cuando sabes que vas a tener que trabajar con tus manos. La movilidad y la seguridad son más importantes que el estilo, pero aún así quieres lucir bien.
En este caso no es necesario usar saco, una chamarra lisa estilo bomber puede funcionar. Camisas o playeras, en este caso pueden llevar patrones o estampados pero procura que no sean llamativos y de mal gusto. Las camisas a cuadro o de rayas siempre están a la orden. Evite los jeans de mezclilla azul claro, mejor usa pantalones de trabajo color caqui, azul marino o marrón, a menos de que el trabajo especifique estilo y marca.
En cuanto a los zapatos, botas de trabajo si es relevante, zapatos casuales de cuero o botas si no lo es. En cualquier caso asegúrate de que estén limpios. En cuanto a accesorios, nada que pueda entorpecer tus actividades, un reloj resistente y un cinturón de cuero liso (a menos que por motivos de seguridad no sea necesario). Olvida las corbatas en este caso.
Y bueno, caballeros, finalizaré por recordarles que además de su ropa, físicamente procuren verse bien peinados, acicalados y oliendo lo mejor posible.