El momento de convertirse en padre, es sublime; tanto, que tal vez ni te des cuenta de un nuevo brillo en tus ojos y una sonrisa que nadie te había visto jamás.
Por fortuna, Tom Oldham, un fotógrafo londinense, pasó 72 horas en la sala de partos de un hospital fotografiando a los padres, antes y después de conocer a sus hijos, en un proyecto encargado por PlayStation, que servirá como promoción para el nuevo título de God of War, que trata precisamente de la relación de un padre con su hijo.
1. Pedro Diego Fernández – 34 años
El nacimiento fue mucho más abrumador de lo que esperaba, pero me sentí increíble tan pronto como sostuve a mi hijo saludable y lo vi abrir los ojos. Solo quiero ser el mejor hombre para mi pareja y mi bebé.
2. Federico Grillo – 34 años
Después del nacimiento, cuando la adrenalina se estaba disipando, sentí que el tiempo se había ralentizado. Estaba sosteniendo a mi hijo y me sentí muy tranquilo. Sé que la paternidad me motivará a obtener lo mejor para mi familia.
3. Tom Chapell – 35 años
Creo que mis prioridades cambiarán significativamente ahora que soy padre. Solo teníamos que pensar en nosotros, antes, pero ahora, para todo se tendrá en cuenta a mi hija, en mente… y con razón.
4. Hector Adebambo – 32 años
Para mí, convertirme en un papá que acaba de ser pateado por la naturaleza, se siente bien. He estado hablando con mi hijo durante nueve meses y finalmente él está aquí.
5. Toan Lam – 34 años
Cuando nació mi hijo, mi visión de la vida cambió instantáneamente y sabía que tendría que estar allí en todo momento para verlo crecer. Convertirse en responsable de otro ser humano es la experiencia más surrealista; no puedo expresarlo con palabras, pero espero que los retratos transmitan la magnitud de este sentimiento.
6. Andy West – 36 años
Inmediatamente me di cuenta de que tener un hijo va a tener un efecto muy profundo, porque siempre seré responsable de otra persona.