Viajar en transporte público tiene sus pros y contras. Por un lado, es barato y al estar en un transporte colectivo, la contaminación del vehículo se divide entre cada uno de los usuarios. Por otra parte, el estado de estos no suele ser muy bueno y en horas pico es inevitable oler la humanidad que circula en el aire del interior.
Pero algo de lo que muchas personas podrían llegar a quejarse es de los niños. Si bien todos conocemos a varios chiquitines que desde muy pequeños aprenden a comportarse en el transporte público, cuando el calor y el tiempo a bordo se combinan, la desesperación y el llanto de los infantes es inevitable. A nadie le gusta compartir espacio con un niño llorando, pero es parte de la vida; tal vez nosotros fuimos ese niño.
Un video que comenzó a circular en internet en 2020 volvió a hacerse viral. En él se muestra a una niña, quien no pudo contener el llanto en el interior del tren. La pequeña viajaba en un vagón en el que se encontraban un grupo de hombres, aparentemente en estado de ebriedad, aunque, cabe aclarar, este no fue el motivo del llanto.
Cuando los hombres vieron que la niña comenzó a llorar, entre todos empezaron a cantar Baby Shark a todo pulmón. A la niña le pareció extraño, pero cuando los adultos le dieron espacio para cantar, ella dejó de llorar y continuó con la famosa canción. Todos en el vagón se divirtieron y algunos comenzaron a grabar el gracioso momento protagonizado por un grupo de hombres maduros y una niña.
Una niña estaba llorando en el metro, y estos borrachos decidieron hacerla sonreír cantando Baby Shark pic.twitter.com/ioM4iMeTxX
— ceciarmy (@ceciarmy) November 7, 2022
En las publicaciones no queda claro en donde ocurrió la grabación, pero varios usuarios de redes sociales han señalado que podría tratarse de un sitio en Brasil, por el estilo de construcción de los vagones del metro, así como por la camisa de futbol de uno de los hombres que aparece en el video, aunque esta información no ha sido confirmada de manera oficial.
La historia hace recordar a un momento similar que ocurrió a bordo de un avión donde un niño, tras pasar varias horas en control, empezó a llorar en medio del vuelo. Lejos de molestarse, los pasajeros cantaron al unísono Baby Shark. El niño logró controlarse, incluso sonrió por el gesto de los pasajeros. Debe ser bastante gracioso ver a un grupo de adultos calvos o con barba cantando una canción infantil.