El mundo del espectáculo es, sin duda, un entorno en el que hay que mantenerse fresco y proponer novedades y propuestas frescas al público y la industria musical no es una excepción a la regla. Un famoso cantante portorriqueño, con ayuda de un colega dominicano, demostró que los clásicos siguen vigentes y que no hace falta arreglar nada si no está roto, sorprendiéndonos y tocando una fibra nostálgica a la vez.
Haciendo gala de su espíritu decembrino y en la misma vena de The Beatles y Los Borbotones, el 28 de diciembre, Bad Bunny y Arcángel sacaron sus simpsonmaniacos interiores al dar un concierto de a grapa para sus fans al más puro estilo azotea, sobre el techo de una gasolinera en San Juan, Puerto Rico, demostrando que no importa que tan mal conejo sea, para sus seguidores siempre se portará bonito, pues está muy comprometido con la raza que lo sigue.
De improviso y de a montón
En un movimiento sorprendente y muy apreciado por sus fans, el 28 de diciembre, Bad Bunny se presentó en la ciudad de San Juan, en su natal Puerto Rico, en el techo de una gasolinera en la calle Loíza y le ofreció un concierto relámpago gratuito a su gente, acompañado nada más y nada menos que por su pana Austin Agustín Santos, Arcángel, con quien se encontraba realizando trabajos para su nueva producción y con quien colaboró para su canción La Jumpa. Miles de asistentes se presentaron en el breve concierto cuyo público se reunió de improviso.
El regalo que el rapero portorriqueño y su asociado ofrecieron a la gente de San Juan vino después de que el cantante ya hubiera repartido más temprano regalos para niños y jóvenes de escasos recursos a través de su fundación de beneficencia Good Bunny, dejando patente que el popular cantante es partidario de la clásica máxima “más vale dar que recibir”.
La Jumpa: el Padawan se convierte en el Maestro
Según Bad Bunny, el concierto que pudo regalarle a sus fans fue posible debido al foro que le otorgó la filmación de su nuevo video que tenía como objetivo realizar grabaciones para la nueva producción de su canción colaborativa con Arcángel, La Jumpa. Durante el evento fue evidente la buena relación que perdura entre ambos músicos y el modo en que su relación se ha fomentado y crecido.
Durante los inicios de Bad Bunny, Arcángel le dio el empujón que necesitaba para proyectarse al estrellato y La Jumpa habla justamente sobre el éxito que ambos han disfrutado y el modo en que permanecen como firmes amigos y colegas en estos tiempos de bonanza. Cabe mencionar que aunque pudiera parecer una coincidencia, Bad Bunny se compara a sí mismo con los Beatles, junto a quienes dice cruzar la calle, así que lo del rooftop concert bien podría ser un homenaje intencional de su parte al conjunto de Liverpool.
Aprovechando que ya estaba ahí
Como los Borbotones, BAD BUNNY dio un concierto desde el techo de una gasolinera. pic.twitter.com/n9O2NZ4lqa
— tacodealacran (@tacodealacran) December 30, 2022
Para amenizar la velada y agradecer a los asistentes su atención, además de la canción para la que estaban grabando, Bad Bunny interpretó temas como El Apagón, Gato de Noche Efecto y la canción muy aptamente bautizada tomando en cuenta la generosidad del rapero, Me porto bonito. Aparentemente, Arcángel no se quiso quedar atrás y convidó a los asistentes con su interpretación en vivo de Aparentemente.
Bad Bunny podrá ser una celebridad y una figura internacional, pero queda claro que no olvida sus raíces y en este concierto lo demostró, pues no es la primera vez que emplea el escenario de la calle sanjuanina en sus producciones, pues ya había filmado escenas para su tema Bellacoso, que en su momento fue una colaboración con el rapero René Pérez Joglar, mejor conocido por nombre artístico Residente y que es un connacional del Conejo Malo.