“Hombre, mira dónde pude haber estado. Pudiera seguir en prisión o en el infierno por todo lo que hice. Pude haber sido ejecutado en la cámara de gases. Esto es algo escalofriante”.
Estas son las palabras de Danny Trejo en una entrevista para USA Today, que son un resumen de la manera en que se ha transformado su vida.
Hijo de padres mexicanos, nacido en Echo Park, Los Ángeles, en 1944, Trejo pasó la mayor parte de su juventud entrando y saliendo de prisión. A los ocho años probó la marihuana, cuatro más tarde era el turno de la heroína. Pasó por todas las cárceles que existen en California cuando apenas era un veinteañero. Pero la vida del actor de origen mexicano Danny Trejo ha cambiado radicalmente, al punto que ahora es el protagonista de la saga “Machete”, que dirige su primo Robert Rodríguez.
Danny creció entre el crimen; recuerda que fue su tío, un asaltante, quien le dio su primer dosis de heroína antes de cumplir los 13 años. Por eso no sorprende que la mayor parte de la década de los 60, Trejo la vio pasar tras las rejas; aunque para tener un mejor uso de su tiempo se puso a entrenar box, hasta convertirse en campeón de peso ligero y luego welter, esto en la correccional.
En los barrios pobres de su natal Los Ángeles comenzó a cometer crímenes y llegó a estar nueve años preso por robo a mano armada (entró a una licorería con una granada) y venta de narcóticos. Pasó largo tiempo recluso en la temible cárcel estatal de San Quentin, y fue en esta prisión donde comenzó la transformación.
“Me recuerdo diciendo: Dios, si estás ahí, regresa todo al camino que se supone debe ser. Si no estás, estoy jodido”.
Trejo salió en libertad condicional en 1969 y entró al programa de 12 Pasos, donde dejó sus adicciones a las drogas e incluso se convirtió en apoyo para otros jóvenes que presentaban este mismo problema.
Su radical cambio de vida comenzaría en escalada a partir de 1985, cuando casualmente fue descubierto durante el rodaje de la película Escape en tren (Runaway Train, 1985). Trejo visitaba el set para asesorar al actor Eric Roberts en algunos movimientos pugilísticos, pero de paso se ganó un papel en la película, precisamente como un contrincante en el cuadrilátero. Ganaba 380 dólares diarios.
Desde entonces su filmografía comenzó a llenarse de papeles de criminal, incluyendo un par de apariciones en la serie Guardianes de la Bahía. Entre sus películas más conocidas están Fuego contra fuego (Heat, 1995), Con Air (1997) y Seis días y siete noches (Six Days Seven Nights, 1998).
Sin embargo, su principal fuente de éxito ha sido de la mano de su primo Robert Rodríguez y su amigo Quentin Tarantino. Del crepúsculo al amanecer (From Dusk Till Dawn, 1996); Spy Kids (2001); Érase una vez en México (Once Upon a Time in Mexico, 2003) y Grindhouse (2007). Después de Grindhouse llegaría su gran oportunidad: ser el protagonista de Machete, también de su primo Robert Rodríguez. Esto era obvio, pues si buscas a un hombre feo y que atemorice, que parezca exconvicto, ¿quién mejor que Danny?
El sacrificado ascenso a la cima de Danny Trejo fue objeto de un documental realizado el 2005 por Joe Eckardt, y que fue premiado en el Festival de Cine de Phoenix ese mismo año. La película revisa el pasado de Trejo a partir de sus propios recuerdos, el entorno de violencia en el que creció y su vida en la cárcel, una experiencia que revive en las imágenes al visitar la que por muchos años fue su celda en la prisión estatal de San Quentin. El documental titulado Champion incluye testimonios de Robert Rodriguez, Val Kilmer, Dennis Hopper y Steve Buscemi, entre otros.
“Estoy contento de tomar el camino y llegar hasta aquí. Yo creo que esto me hace grande. Todos los días recuerdo que podría estar en una celda de la prisión”.
Con cerca de 200 películas en su filmografía y con 71 años, Danny Trejo sigue en el camino.