Con la salida de la docuserie Arnold en Netflix, la gente está sufriendo una fiebre de Arnold Schwarzenegger, pues, a pesar de que en el documental hay muchas cosas malas y escándalos que son por fin confesados por el fisicoculturista, actor y político, sus logros profesionales no fueron pocos e hizo historia con un régimen de entrenamiento y disciplina que aún hoy es motivo de admiración para los entusiastas de la musculación.
En la serie, Schwarzenegger narra el intenso régimen de ejercicio y sus grandes ambiciones que nunca le permitirían permanecer quieto en un sitio. Entre la autopleitesía que exhibe y los innegables resultados de sus esfuerzos denodados, la historia lo tiene registrado como uno de los grandes del culturismo y con razón, pues aún hoy nos sorprende su físico como adolescente que luego lo llevaría a triunfar en los escenarios, a pesar de que en lo personal haya resultado ser bastante menos disciplinado que en lo profesional.
Prácticamente un niño pero con un físico impresionante
Hora de retroceder en el tiempo a aquellas épocas. Este soy yo, a los 16 años, cuando todavía ni siquiera empezaba a competir.
– Arnold Schwarzenegger
En su cuenta de Instagram, Schwarzenegger compartió muchos de sus recuerdos de cuando fue ganando concurso tras otro de fisicoculturismo por medio de su impresionante físico, que logró esculpir a lo largo de varios años de disciplina y extenuante ejercicio. De entre esas fotos, destaca en la tenía 16 años de edad, apenas un adolescente, pero ya con la promesa de convertirse en un serio competidor de culturismo en un futuro cercano.
Su ascendencia no le ayudó mucho
Schwarzenegger se inició en el culturismo a sus 14 años de edad, tras un año de hacer pesas junto con su entrenamiento de futbol. El actor tenía experiencia con otros deportes por la influencia de su padre, quien quería que sus hijos fueran atletas. Sin embargo, nunca le vio futuro a las ambiciones del actor en el culturismo, a pesar de que solamente en tres años de levantamiento de pesas, el joven atleta logró desarrollar un físico envidiable. A los 17 años empezó su carrera competitiva.
Schwarzeneger confesó que sus ambiciones no podrían haberse cumplido en un entorno como el paterno y que permanecer dentro de Austria solamente le reportaría mediocridad y fracaso a sus propios ojos. Su padre, un hombre duro y conservador, quien el actor ha tachado de simpatizante nazi, nunca le dio el beneficio de la duda y, prácticamente, tuvo que huir de su hogar para lograr inmigrar a los Estados Unidos y cumplir su ambición de tener mucho dinero y ser alguien, lo que, en términos generales, podríamos decir que logró.
Cuando empezó a ganar, se volvió imparable
Mis planes se formaron cuando tenía 14 años. Mi padre quería que yo fuera oficial de policía como él. Mi madre quería que fuera a la escuela comercial. Yo quería ser rico y famoso y lo iba a ser por medio del culturismo.
Cuando se encontraba realizando su servicio militar para complacer a su padre, Schwarzenegger tuvo que dejar su puesto para ir a competir a Mr. Europa Junior porque no le dieron permiso para competir, pues en el servicio militar obligatorio no era posible dejar su puesto durante el entrenamiento básico, y terminó pasando una semana en prisión militar, por lo que luego diría “Participar en esa competencia significó tanto para mí que en el momento no pensé cuidadosamente en las consecuencias”. Pero ese fue el inicio de todo.
Luego de haber perdido contra el tres veces campeón de Mr. Olympia Sergio Oliva en 1969, el austríaco volvió a intentarlo y logró ganar el título en 1970, convirtiéndose en el más joven ganador del galardón con tan solo 23 años, récord que mantiene hasta la actualidad. El resto, como dicen, es historia, pues con lo malo y lo bueno, este disciplinado hombre se ha convertido no solo en una celebridad de Hollywood, sino también en uno de los más legendarios fisicoculturistas que ha habido, con siete títulos de Mr. Olympia bajo el cinto, cuatro títulos de Mr. Universo y su importantísimo galardón de Campeón amateur de fisicoculturismo de 1969.