Todos hemos estado en fiestas en las que alguien termina hasta las chanclas. Incluso hemos sido ese amigo que no controla el trago y termina acostado en el patio, esperando la luz del día (experiencia personal). Pero para esas ocasiones, uno cuenta con sus amigos, sus panas del alma, quienes por el puro amor están dispuestos a cuidarlo a toda costa y hasta dejarlo en su cama con un beso de buenos días.
Hasta a la redacción de La Guía del Varón han llegado imágenes extraídas de TikTok, donde un grupo de “chavos” arrastran a su compañero por los pasillos de la estación del metro en Ciudad de México. Sí, esos mismos que reciben a millones de personas diariamente. Tal parece que el hombre inconsciente había sido noqueado por el alcohol y sus amigos trataban de transportarlo, pero no pudieron hacer más por él que arrastrarlo en el piso.
Los videos fueron colocados en la cuenta del usuario @crisroaz27, donde pudo constatar con evidencias que aún existen amigos que están dispuestos a todo. Aparentemente, las imágenes fueron captadas en la estación Allende de la Línea 2 en una hora no muy concurrida. Por la forma en que se tomó el video, el autor estaba del otro lado del andén, esperando el tren que iba en otra dirección.
Para musicalizar el clip, el usuario eligió una pieza que refleja lo que estos dos carnales estaban pasando al arrastrar a su pana en calidad de bulto. Los amigos, de Bob Esponja, fue la canción ideal para esto y aunque el panorama no pintaba nada bien, no iban a dejar a su compita a expensas de los peligros de la ciudad más grande del país azteca.
Hasta las chanclas anda este chavo. Lo bueno que estaba la poli para que no lo echaran a las vías. Por fortuna eran sus amigos y lo estaban ayudando. pic.twitter.com/NGu8UB9hjM
— tacodealacran (@tacodealacran) August 18, 2022
Solo imaginen cómo fue cargarlo para bajar las escaleras del subterráneo. Hasta le tuvieron que ayudar a ponerse un tenis porque el morrito estaba, posiblemente, más que fumigado y, de seguro, no se daba cuenta de dónde estaba. En la escena se puede ver que un elemento de la policía, quien cumplía su deber de vigilancia del andén, solo se limitó a ver lo que pasaba, ya que no podía hacer mucho. Además, hay un segundo video, pero en este no pasó mucho, solo muestra unos segundos extra al metraje.
Desafortunadamente, el autor del video no participó con esta pandilla de tipazos rifados, por lo que nunca sabremos si el beodo amigo llegó a su casa a soñar con los angelitos o se quedaron en el metro a expensas de las apariciones paranormales como “La mujer sonriente” o “El vampiro de Barranca del Muerto”, o peor, las enormes ratas que habitan en los túneles.