La situación económica para algunos ya era complicada y con la pandemia de coronavirus ha llegado a niveles todavía peores, por lo que muchas personas buscan el medio para garantizar el sustento diario, como don Guillermo, un hombre de 70 años que vive en Ciudad Obregón, México, quien busca desesperadamente que alguien lo contrate para poder llenar el requisito que le falta y así poder recibir una pensión mensual para cubrir sus necesidades.
Para que el gobierno mexicano otorgue este beneficio es necesario que se cotice determinado número de semanas trabajadas ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), para lo que la persona que contrata paga un porcentaje y de esta manera al momento de retirarse, el trabajador puede recibir una cantidad mensual, que varía de acuerdo al sueldo recibido y la cantidad que el empleador paga mensualmente por su alta en el IMSS. Más o menos así funciona la cosa.
La cuestión es que a don Guillermo le faltan todavía 40 semanas para cubrir el requisito, así que está buscando quién lo pueda contratar y pague la cuota ante el instituto, para lo que una mujer identificada como Amy García compartió una publicación en Twitter donde este hombre ofrece sus servicios ya que conoce de varios oficios, por lo que puede realizar trabajos de albañilería, entre otros, y con esto lo pueden ayudar a que consiga su pensión.
Los comentarios comenzaron a llegar, explicando que hay opciones, como que él mismo pague sus cuotas, y por ahí hubo alguien que comentó que tal vez entre varios se podrían juntar para hacer los pagos correspondientes, en el caso de que don Guillermo no tenga los recursos para hacerlo. También se etiquetó a grandes empresas, sin embargo, hasta el momento todavía no hay noticias de que ya lo haya logrado, pero esperamos que pronto consiga su meta.
https://twitter.com/FlorDCapomo/status/1314105115356192769
Casos como este hay por montones, no solo en México sino en todo el mundo, en los que personas que se dedican a algún oficio y no están dentro de una empresa establecida no están cotizando y después sufren por acceder a una pensión, y también hay que decirlo, aunque lo logren muchas veces la cantidad que reciben no alcanza para lo básico, y esto es lamentable pues luego de toda una vida de trabajo no cuentan ni siquiera con lo indispensable.