Alrededor del mundo muchas personas se han tenido que separar, pero en algunos casos que son terribles esa separación será para siempre, ya que muchos de quienes fueron contagiados por el coronavirus ya no regresaron del hospital. Afortunadamente también hay otros que lograron vencer la enfermedad y hoy están juntos de nuevo, como el caso que verás a continuación.
Giorgio y Rosa son una pareja de abuelitos que vive en Italia, que en un momento se convirtió en uno de los focos de la pandemia. Desafortunadamente este hombre tuvo que ser hospitalizado al presentar síntomas de Covid-19. Unos días después también su esposa resultó contagiada y fue internada en el mismo hospital.
A pesar de que estaban en el mismo lugar no les permitía visitarse, y es que las medidas de seguridad que se tomaron han hecho que miles de pacientes tengan que seguir el tratamiento completamente solos, e incluso muchos han muerto sin poder despedirse de sus seres queridos, en una situación que resulta por demás triste.
Durante su estancia en el hospital todo el mundo se encariñó con Giorgio por su buen ánimo, y porque lejos de quejarse se la pasaba agradeciendo por los cuidados y atenciones que el personal le brindaba a él y a su esposa. También les resultaba muy tierno que se la pasara preguntando por la salud de su compañera.
En algún momento confesó lo triste que se sentía por estar separado de Rosa, y es que tienen 52 años de casados, en los que prácticamente nunca habían estado sin verse, además de la angustia que provocaba el pensar en que tal vez ya no se volverían a encontrar jamás. Afortunadamente, ambos se recuperaron y las imágenes de su reencuentro son emotivas.
Luego de un mes de estar separados, por fin les dieron la autorización para reunirse. Lo primero que hicieron fue fundirse en un amoroso abrazo, lo que se ha vuelto viral, y es que si lo piensas tú harías lo mismo con alguien a quien amas y pensabas que no verías de nuevo, luego de una situación desesperada como la enfermedad.
Fue una de esas reuniones que no se olvidan. Ninguno de nosotros pudo contener las lágrimas. Un largo abrazo, dulces palabras, diez minutos de ternura.
—Doctora de Giorgio y Rosa
Esperemos que este reencuentro brinde esperanza a quienes todavía están luchando contra la enfermedad y pronto puedan reunirse de nueva cuenta con aquellos a quienes aman, y también como un homenaje a quienes ya no pudieron librarse de la muerte ante la pandemia que azota al mundo.