Una teoría conspirativa dice que detrás de la ternura de los secuaces más graciosos del mundo de las películas animadas, se esconde una horrible historia de tortura de la Segunda Guerra Mundial.
Desde que aparecieron en la película Mi Villano Favorito, los minions se volvieron personajes reconocidos en todo el mundo, pero cuando uno se pregunta por el origen de estos tiernos y amarillentos secuaces hay quienes tienen lúgubres teorías que involucran experimentos nazis con niños judíos en la Segunda Guerra Mundial.
Unas fotografías de aspecto viejo circularon por las redes sociales y desataron las más locas teorías de conspiración de los imaginativos usuarios de Internet. Pudieron haber pasado desapercibidas, pero debido al éxito de los minions, hubo quienes se apresuraron a decir que había una relación extraña entre las imágenes y los personajes.
Entonces algunos conspiranoicos a la primera oportunidad dijeron que los minions estaban inspirados en las personas de la fotografía. Además de esta loca idea, decidieron ahondar en el pozo de las teorías conspirativas y dijeron que la foto era de niños judíos que eran sujetos de experimentos nazis.
Para estos pensadores, minions era la palabra con la que los científicos alemanes llamaban a los niños judíos que servían en un experimento en el que usaban gas. O sea, básicamente, los cascos eran usados para poner a prueba el gas mortal usado en las temibles cámaras de los nazis.
En realidad la fotografía no tenía nada que ver con la Segunda Guerra, pero sí con la Primera. La imagen es de 1908 y muestra a los tripulantes de un submarino portando un traje especial para lograr escapar si se producía algún accidente al momento de sumergirse.
El traje fue diseñado por el capitán Hall y el cirujano a bordo O. Rees. Consistía en un casco duro y una túnica de manga larga con cinturón. Dentro de la túnica había una lata de peróxido de sodio que emitía oxígeno mientras absorbía dióxido de carbono. Pero debido al gran espacio que ocupaba, el traje fue descontinuado.
Seguramente a Gru como buen villano le gustaría más la versión de los niños judíos, aunque sea otra teoría conspirativa falsa.