Seguramente te ha pasado que te acuestas en la cama y te acomodas perfectamente solo para darte cuenta de que dejaste la luz del cuarto o la televisión encendida. Quizá esto podría solucionarse en un futuro cercano con un tatuaje adherible que envía señales eléctricas.
El mundo de la tecnología y la tinta en la piel se están combinando de maneras asombrosas. La Universidad de Ajou, en Corea del Sur, creó un tatuaje electrónico que se puede colocar fácilmente (y sin dolor, qué alivio) en la piel y genera señales eléctricas cuando es tocado.
Este genial invento fue presentado en Advanced Energy Materials en donde los investigadores explican que se trata de una delgada calcomanía hecha con proteína de seda y que usa una tinta con nanofibras de carbono. El diseño del tatuaje se hace sobre la calcomanía, así que no tendrás que sufrir el dolor de una máquina para tatuajes convencional.
El tatuaje electrónico se activa a través del tacto y puede conectarse a dispositivos para encender luces LED o hacer funcionar pequeños aparatos electrónicos como cronómetros.
Como son muy delgados, los tatuajes electrónicos se pueden adherir bien incluso en superficies muy arrugadas como huellas dactilares. Excepto la ducha y el baño, los tatuajes electrónicos no interfieren con la vida cotidiana de los usuarios.
– Kim Sung-hwan, profesor de física coordinador del estudio
Este tatuaje electrónico no es permanente y se puede lavar simplemente con agua y jabón. Así que podrías tener diferentes diseños en el cuerpo que te sirvan para activar diferentes dispositivos dependiendo de tus necesidades.
Otras universidades y centros de investigación en electrónica están trabajando para crear nueva tecnología en forma de tatuajes, que puedan tener mayor potencia de forma segura para las personas y que incluso puedan conectarse a sus teléfonos celulares y hacer monitoreos hasta de su condición física, como medir su ritmo cardíaco.
Tal vez estos inventos podrían ayudarnos en el futuro a controlar dispositivos con tan solo tocar nuestros tatuajes. Sería increíble poder encender y apagar aparatos electrónicos presionando un tatuaje (de calavera, obvio) en nuestro brazo.