Para nadie es un secreto la valentía y heroísmo que han demostrado muchos perros a lo largo de la historia en época de guerra, pues han salvado innumerables vidas humanas y han cosechado amigos y cariño en las zonas de guerra en las que les ha tocado estar al frente de batalla. Es por ello que ahora hay nuevas noticias y grandes esperanzas para estos perros militares.
El destino que tienen estos guerreros canes no es precisamente el más justo, y mucho menos el que deberían recibir por sus actos heroicos.
Todavía hace algunos años, los canes que estaban activos o que ya habían dejado de prestar servicios para el ejército, no eran regresados a sus países de origen ni con las personas que se habían encargado de cuidarlos durante este periodo de trabajo; se convertían en civiles, pero se desconocía qué sucedía en los últimos días de estos valerosos y patrióticos soldados.
Afortunadamente hay mejores noticias para los perros militares, y hace menos de dos meses se firmó la Ley de Autorización de Defensa Nacional en Estados Unidos, aprobado ya por el Senado, el cual propone regresar a los canes a su lugar de origen o, mejor aún, a que sus cuidadores puedan solicitar la adopción.
Es innegable el estrés postraumático que sufren los militares al regresar a sus hogares, y con los perros sucede exactamente lo mismo. Al otorgarles la oportunidad a sus tutores de adoptarlos, se busca que la recuperación sea de manera integral.
Y aunque aún falta la firma del presidente, se espera que se convierta realmente en ley para así proporcionarles a los veteranos peludos una verdadera calidad de vida y condecoraciones llenas de amor y gratitud, tal como ellos lo hicieran durante la guerra… porque ellos también son héroes.