Batman es uno de los superhéroes más interesantes, y sin lugar a dudas, el favorito de todos. En gran parte por su personalidad, pues como todos saben, tiene muchos conflictos en su cabeza, aunque tal vez no tantos como sus archienemigos, pero seguro sería un paciente interesante para cualquier psicólogo.
La muerte de los padres de Bruce Wayne, quien luego se convierte en Batman, detonó la aparición del vengador nocturno. Por eso, hay quienes han señalado algunas de las rarezas psicológicas del hombre-murciélago, desde miedo a los payasos, hasta depresión.
1. Desorden obsesivo compulsivo
Según los analistas, este desorden es la causa de que no utilice un arma para combatir. En lugar de gastar su dinero en una buena vida, prefiere pelear con enemigos indestructibles. Además, se obsesionó con el entrenamiento físico a lo largo de los años.
2. Estrés postraumático
Al parecer todo objetivo de su vida está en torno al asesinato de sus padres, el cual presenció cuando era niño. Ese gran trauma explica en parte su mal genio y la necesidad de encontrar culpables de su pena.
3. Doble personalidad
Bruce Wayne es Batman, y en ocasiones confunde los roles. Su vida está dada en relación a Batman. No puede diferenciar entre el personaje y Bruce Wayne.
4. Depresión
Batman es con frecuencia un personaje depresivo. Es casi seguro, dicen, afirmar que está deprimido por la muerte de sus padres. Normalmente aleja a sus parejas y amistades.
5. Personalidad antisocial
Batman es muy poco amigable, si no lo has notado, siempre está escondido tras una máscara y vive en las sombras.
6. Coulrofobia
La coulrofobia es el miedo irracional a payasos y mimos. Además de pelear por años contra el Guasón, parece que también tiene terror a los payasos. Para combatir este terror, en su baticueva tiene una figura de un payaso. Eso le ayudará a vencer sus miedos.
7. Trastorno de duelo
Luego de morir sus padres, su respuesta fue anormal. ¿Quién de los que pierden a sus padres decide convertirse en vengador justiciero?
8. Egomanía
Batman o Bruce Wayne, está obsesionado con sí mismo. Todo en su mansión está enfocado en su combate al crimen. Además, cree que nadie más puede hacerlo. Aunque haya otras personas, él siempre decide qué camino se debe tomar. Además, parece que todo en su mundo gira alrededor de su obsesión y su imagen oscura.
9. Síndrome de Munchaussen
Este síndrome, con la variante de “poder”, es la de aquellos padres o cuidadores que maltratan a los hijos. Batman pone en peligro a Robin cuando cree que así puede salvarlo para luego sentirse bien por ello. Si muere, puede renovar su juramento de combatir a los criminales.
10. Problemas de ira
Claramente, Batman tiene las actitudes de las personas iracundas. Es atemorizante cuando se enoja.